REDACCIÓN
El estado de Yucatán comenzó con el pie derecho el ciclo de producción de miel 2021-2022, con 906 toneladas, en noviembre, donde se apuntó el mejor registro de los últimos 9 años, el segundo mejor de los últimos 10 e impulsó el acumulado nacional para un récord no visto en 20 años.
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Este hecho puede ser el principio del fin de la pesadilla del año pasado para los apicultores locales, cuando, en total contraste, comenzaron con el pie izquierdo, ya que, en noviembre y diciembre de 2020 ni siquiera se tuvo un registro oficial de cultivo, o sea, prácticamente cero.
De hecho, esa inercia negativa del ciclo 2020-2021 no solo redujo la colecta del dulce, sino que le quitó a Yucatán el primer lugar nacional y Campeche lo ocupó con una producción tal que superó, desde julio, la meta de este año: casi 9 mil toneladas.
ESTADÍSTICA
En contraparte, la entidad apenas sumó 6 mil 971 toneladas de enero a noviembre y aún está a 3 mil 51 de la meta trazada, que es de 10 mil 22.
Pero la estadística muestra que será difícil cumplir el “pronóstico”, pues ni en su mejor diciembre, el de 2013, con mil 520 toneladas, se acercó a la cantidad necesaria para completar el 2021.
Y aunque lo logrado en noviembre, primer mes del ciclo, es esperanzador, no solo para Yucatán, sino para todo el país (a pesar de que los periodos productivos son diferentes) porque sumó 12 mil 69 una cifra histórica, pues no se tiene registro similar ni para el mes 11 de un año ni para ningún otro en los últimos 20 años.
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En lo que respecta al acumulado del año en producción de miel local, como ya hemos dicho, la entidad se quedó corta: está 30% abajo de la meta de 10 mil 022 toneladas “programadas”.
De acuerdo con las estadísticas de los últimos 20 años, será difícil que con lo cosechado en diciembre pueda alcanzar la meta de 2021, pero indudablemente el año ya es mejor que el pasado, gracias a que en lo fuerte del ciclo (marzo, abril, mayo) lo alcanzado fue bueno, pues sumó con casi 4 mil toneladas.
AFECTACIONES
Cabe señalar que hasta el 2019, antes de la pandemia, en la entidad existían cerca de 12 mil 500 productores que trabajaban en alrededor de 330 mil colmenas activas de abejas, según el último reporte de la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder).
La entidad era hasta ese entonces el principal productor de miel a nivel nacional, con volúmenes anuales que superaban las 9 mil toneladas, y un gran porcentaje era exportado a los principales compradores: Alemania, Estados Unidos, Arabia Saudita, Inglaterra, Suiza y España.
Sin embargo, con la emergencia sanitaria cientos de personas que se dedicaban a esta actividad se vieron obligadas a abandonar las colmenas, debido al confinamiento que decretaron las autoridades para evitar mayores contagios y no poner en riesgo la salud de la población.