Sandra Gayou Soto
Con el aumento en el uso de internet y aplicaciones en niños y jóvenes este sector de la población se encuentra más expuesta a ser blanco de delitos cibernéticos como el grooming, práctica en la que adultos se hacen pasar por menores de edad poniendo en riesgo a los menores, la supervisión de madres y padres es necesaria para prevenir, evitar y denunciar este tipo de prácticas.
Necesaria la supervisión de menores en uso de internet para evitar delitos cibernéticos
El Centro Estatal de Prevención del Delito y Participación Ciudadana (Cepredrey) realizó un estudio en el 2020 sobre violencia donde se destacó que mujeres y jovenes entre 15 y 34 años son la población más propensa a ser víctimas de algún delito de ciberacoso sexual, al respecto Gabriela Cervera Ramayo, coordinadora del área de psicología de la Unidad de Atención Sicológica, Sexológica y Educativa para el Crecimiento Personal (Unasse) aseguró que es necesario supervisar la actividad en internet de niños y jovenes para la prevención de este tipo de delitos.
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La especialista recordó los recientes casos de menores de edad en Yucatán que han salido de sus hogares para reunirse con personas que conocieron a través de las redes sociales como Facebook, Instagram o Tik tok, considera que esto puede suceder a través del “grooming”, que es cuándo una persona adulta se hace pasar por alguien menor para “atrapar a la víctima, una persona adulta crea un perfil falso”, con este mecanismo logran la confianza de las menores de edad.
Esta práctica puede llevar al intercambio de fotografías y datos personales sin el conocimiento de los padres, esto puede provocar que los menores sean víctimas del delito de “sextorsión”, la especialista considera que ésta práctica ha ido a la alza y es importante no confundirla con el “sexting, que es una práctica que es parte de nuestros derechos sexuales, pero se vuelve sextorsión cuando a través del intercambio de fotos o videos íntimos se empiezan a pedir cosas a cambio”.
La sextorsión implica la petición de dinero, más fotos y videos así como la amenaza de divulgar dicho material en redes sociales, “el grooming y la sextorsión van muy de la mano porque al final del día crea en niñas, niños y adolescentes temor”, aseguró que pueden generar otro tipo de afectaciones como “el aislamiento, la depresión y muchas veces al suicidio”.
Consideró que en la actualidad niños y jovenes le “han perdido el miedo a conocer gente en redes sociales”, destacó la importancia de respetar la privacidad de este sector de la población pero bajo cierta supervisión de los padres y madres de familia, que conozcan con quién están interactuando y de qué forma, resaltó la necesidad de abrir canales de comunicación con niños y jóvenes con la intención de “hablarles de los posibles riesgos”.
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Respecto al actuar de las autoridades en materia de seguridad, Cervera Ramayo aseguró que la Secretaría de Seguridad Pública se ha encargado de emitir la Alerta Amber cuándo el caso lo requiere, “se entrelazan con autoridades de otros estados para la búsqueda de estas niñas o adolescentes”, sin embargo no conoce de investigaciones más exhaustivas por parte de la policía cibernética.
Como recomendación a los padres de familia, Gabriela Cervera sugiere hablar abiertamente del tema con los menores sobre los riesgos que existen con el uso de las redes sociales, nombrar a los delitos por su nombre, “hay personas adultas que no siempre tienen las mejores intenciones”, fomentando la confianza en la familia.
Finalmente hizo un llamado a padres y madres a utilizar los controles parentales que ofrecen tanto navegadores de internet como aplicaciones para el monitoreo de la actividad en internet de las y los menores, respetando su derecho a la intimidad y privacidad, en el caso de ser víctimas de algún delito cibernético destacó la importancia de la denuncia ante las autoridades competentes.
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