Toda mujer que llega a Yucatán sin conocer a nadie, ahora tiene una comunidad a su disposición que la ayudará a empoderarse y a lograr su crecimiento personal.
Se trata de Nuevas en Mérida, fundada y coordinada por Giovanna González Ortiz, y es una organización que se ha convertido en un faro de esperanza para aquellas que enfrentan el desafío de adaptarse a una nueva vida en una ciudad desconocida.
La historia de Nuevas en Mérida es un testimonio del poder de la solidaridad femenina y la capacidad de transformación que surge cuando las mujeres se unen con un propósito común.
En un mundo donde la conexión digital se ha vuelto más vital que nunca, esta comunidad ha sabido utilizar las herramientas disponibles para tender puentes de amistad, apoyo y colaboración.
La pandemia, paradójicamente, actuó como catalizador. En un momento de aislamiento y distanciamiento social, González Orriz vio la necesidad de crear un espacio donde las mujeres pudieran encontrar apoyo mutuo y compañía, incluso en tiempos de incertidumbre y crisis.
“Tenemos aproximadamente tres años, la idea empezó al poco tiempo de llegar a Mérida porque me encontraba en plena pandemia, sin conocer a nadie y mi área de expertise, que son las redes sociales. Al cabo de unos meses ya éramos más de 500 y hoy ya somos más de 20 mil”, explicó.
Giovanna explicó que primero creó un grupo de Facebook privado y es así como surge y ahí empiezo a conocer en persona a las primeras integrantes del grupo, de ahí empiezan a surgir grupos de WhatsApp.
Dijo que no cualquier persona podía entrar debido a que muchas de las integrantes vienen huyendo de la inseguridad en sus lugares de origen o pleitos con sus ex parejas.
La diversidad de la comunidad es palpable, con mujeres de distintas nacionalidades (desde Estados Unidos hasta Corea), edades y trayectorias de vida que encuentran un espacio común para compartir experiencias, aprender unas de otras y construir juntas un futuro más prometedor.