El auditor del Centro Nacional para la Prevención de Accidentes (Cenapra), René Flores Ayora indicó, en el marco del Día de la Educación Vial, que se conmemora este 5 de octubre, que en Yucatán, debido a la gran cantidad de personas que se mueven a bordo de una moto, encabezan la lista de fallecimientos por accidentes de tránsito con un total de 108 casos registrados “aunque podrían ser muchos más”.
Motociclistas y peatones principales víctimas de accidentes viales
En el caso de los fallecimientos de peatones hasta este 5 de octubre, van 33. En la lista le siguen 29 conductores de autos, 23 viajeros/acompañantes y 11 ciclistas, para un total de 204 víctimas fatales. Tan sólo en Periférico se han registrado 16 hechos de tránsito de fatales consecuencias.
El especialista resaltó que entre los motociclistas, por las características de su vehículo, corren más riesgos que las personas que viajan en autos, de ahí la importancia de evitar “zigzaguear”, rebasar por la derecha o meterse al paso de los automotores.
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Flores Ayora indicó que en Mérida, al igual que en todo el Estado de Yucatán, se adolece de la cultura y de la educación vial, en el sentido del comportamiento de los actores de la vialidad: peatones, ciclistas, motociclistas y automovilistas.
“Ya van más de tres años que el Congreso del Estado aprobó la iniciativa de que la educación vial sea obligatoria desde el preescolar hasta la preparatoria.
“Hace falta mucho por hacer en Mérida en lo relativo de la cultura vial, es importante retomar el papel que jugaba la materia de civismo en la secundaria, en donde se tenían varias lecciones en materia vial” expresó.
Manifestó que es muy fácil darse cuenta del comportamiento de todos los actores de la vialidad: el peatón no cruza en las esquinas; los motociclistas van zigzagueando y rebasando por la derecha, los automovilistas no guardan su distancia de seguridad y por ello ocasionan las famosas carambolas y tampoco usan los direccionales cuando van a doblar.
Destacó que la cultura vial es la manera en cómo los seres humanos viven, sienten, piensan y actúan, desde y para el uso cotidiano de espacios de la movilidad y su desplazamiento, la educación vial también es conocida como la educación para la seguridad vial, consiste en la adquisición, desarrollo e integración de las capacidades o competencias que sean destinadas para promover alternativas óptimas y positivas del tránsito.
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“Todos tenemos que hacer un acto de conciencia cada vez que estemos conduciendo un vehículo automotor, ya sea automóvil o una moto, estemos en una bicicleta o estar caminando como de peatón.
“El vehículo automotor es como un arma que se puede activar en cualquier momento y pueda fallecer una persona a consecuencia de un siniestro de tránsito” expuso.
El especialista también en ingeniería de tránsito recalcó que hay que ser empáticos con las personas vulnerables como son los peatones, los ciclistas y motociclistas, al afirmar que no tienen una coraza de acero que los proteja en comparación con el automóvil.
EDGAR MUÑOZ