Con la finalidad de que la guayabera yucateca tenga un valor agregado buscarán una segunda denominación de origen, la geográfica, ya que las alforzas que hacen los artesanos locales son únicas en su tipo, este proceso durará un año y medio, así lo informó la Cámara Nacional de la Industria del Vestido en la entidad.
El presidente de esta cámara en la entidad, Jorge Moreno González comentó que este proceso servirá para darle un segundo valor agregado a la guayabera yucateca, ya que actualmente tiene Así en la Guayabera, Así es Yucatán. Externó que también se busca proteger la industria de las ideas de los diseñadores y las personas artesanas de la entidad.
Buscarán segunda denominación para la Guayabera yucateca
El dirigente empresarial comentó que particularmente están en búsqueda del reconocimiento de localización geográfica ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI), esto quiere decir que se encuentran en un proceso para el reconocimiento de las alforzas yucatecas, pues son únicas en su estilo, es decir, son métodos que se han perfeccionado en la región.
Conoce a Yucatán desde las alturas
El presidente de CANAIVE en el estado destacó que la confección de la guayabera en la entidad la hace única a las que se realizan en otras partes de México, incluso se diferencian con las elaboradas alrededor del mundo.
Explicó que las alforzas yucatecas son bordados que caracterizan a las prendas y es ese particularmente este distintivo, el que quieren se reconozca.
Detalló que este proceso lo iniciaron durante el año pasado, por lo que estiman que la respuesta llegue de 18 a 24 meses.
Destacó que de obtener esta segunda denominación sería la única en su tipo, por lo que también sería una manera de proteger las creaciones del talento local.
Por último, Moreno González en cuanto a posibles incrementos de esta tradicional prenda dijo que desde el último año y a la fecha han mantenido sus precios, de tal suerte que el precio varía, según con el tipo de tela que se elabore la guayabera, siendo las más baratas las que se hacen de algodón y las más caras aquellas de lino; los precios van desde los 300 hasta cinco mil pesos de acuerdo al material y lo complejo del diseño.