Saint-Étienne, Francia – La selección argentina sub-23, dirigida por Javier Mascherano, vivió un debut amargo en los Juegos Olímpicos de París 2024 al caer 2-1 ante Marruecos en el estadio Geoffroy-Guichard este miércoles. El encuentro, marcado por un final insólito, se convirtió en un escenario de controversia y tensión.
A pesar de que el partido había sido dado por concluido, tanto Argentina como Marruecos regresaron al campo de juego dos horas después para disputar tres minutos de tiempo añadido, sin la presencia de espectadores.
Esto ocurrió tras una interminable reposición de 16 minutos en la que Cristian Medina logró anotar un gol que inicialmente igualaba el marcador 2-2, pero fue invalidado por fuera de juego tras una revisión del VAR.
El clima en el Geoffroy-Guichard se volvió tenso cuando los hinchas argentinos, aún presentes, reaccionaron con pitos durante el partido, en medio de una controversia por una canción considerada ‘racista’ hacia los jugadores franceses.
El ambiente se volvió aún más hostil cuando se arrojaron botellas y vasos al campo, lo que llevó al árbitro sueco Glenn Nyberg a enviar a los jugadores a los vestuarios sin haber pitado el final.
Al regresar, Argentina no pudo revertir la situación y aceptó la derrota, dejando a su equipo con poco margen de error en su camino hacia el oro olímpico. Marruecos, capitaneado por el lateral del PSG Achraf Hakimi, mostró un sólido desempeño con dos goles de Soufiane Rahimi (45+2 y 49), mientras que Giuliano Simeone descontó para la Albiceleste (68).
El debut sudamericano mostró las mismas debilidades observadas en el Torneo Preolímpico Sudamericano, donde Argentina quedó en segunda posición detrás de Paraguay. Para aspirar al oro, el equipo de Mascherano deberá sumar puntos en sus próximos encuentros contra Irak y Ucrania en Lyon.
Mientras tanto, Marruecos, dirigido por Tarik Sektioui, sigue cosechando éxitos tras su destacado cuarto puesto en la Copa del Mundo de Catar. Los marroquíes se enfrentarán a Ucrania en su próximo partido en Saint-Étienne.
La competencia de fútbol masculino, que se desarrolla en siete ciudades francesas, continúa a la espera de la ceremonia de apertura programada para el viernes en el río Sena.
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