En el contexto de que Yucatán tendrá un récord histórico en temperaturas altas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y sitios especializados advierten que por lo menos trece enfermedades estarán presentes en esta temporada.
Si bien el calor puede ser agradable en pequeñas dosis, la exposición prolongada a temperaturas extremas puede desencadenar diversos padecimientos e incluso poner en riesgo la vida, señalan expertos. También señalan que los niños pequeños, los adultos mayores, las personas con enfermedades crónicas y las mujeres embarazadas son especialmente vulnerables a los efectos del calor.
“Las altas temperaturas influyen en el comportamiento de las células del sistema nervioso central, cuyo ritmo se ralentiza”, aseguró el doctor Ernesto Orozco Sevilla, especialista en neurología.
Indicó que a partir de los 38,8 °C, nuestro cerebro puede sufrir un funcionamiento anómalo; incluso, exposiciones breves de 60 minutos a estas temperaturas generan cambios transitorios en la memoria a corto plazo y en el razonamiento. De acuerdo con una investigación de 24 HORAS Yucatán, estos son los trece padecimientos más comunes por las temperaturas altas.
El especialista mencionó que el estrés por calor es una respuesta fisiológica natural al aumento de la temperatura corporal y puede tener efectos negativos en la salud, especialmente si no se toman medidas para prevenirlo.
Añadió que también se presentan calambres, dolor de cabeza, mareos, náuseas, irritabilidad, dificultad para concentrarse o insomnio. Una de las afectaciones, dijo el doctor, que suele ser la más común pero una de las más peligrosas es el golpe de calor, pues se produce cuando la temperatura corporal aumenta a 40°C o más, y puede causar daños cerebrales, renales y otros órganos.
Los síntomas incluyen fiebre alta, confusión, desorientación, convulsiones, pérdida del conocimiento y piel seca y caliente. Indicó que también la piel puede presentar erupciones cutáneas conocidas como “sarpullido”, pequeñas protuberancias rojas que pican y aparecen en la piel, generalmente en áreas como el cuello, el pecho y la espalda. Son más comunes en bebés y niños pequeños.
Mencionó que en esta temporada incrementan las enfermedades transmitidas por mosquitos, pues las altas temperaturas favorecen la proliferación de los insectos como el Aedes aegypti que causa el dengue, el chikungunya y el zika. Ante este panorama, el especialista recomendó extremar precauciones, tomar constantemente agua y no exponerse al sol.
¿Cómo cuidarnos esta temporada?
- Beber abundante agua.
- Evitar las bebidas con alcohol y cafeína.
- Usar ropa ligera y holgada de colores claros.
- Protegerse del sol con sombrero y protector solar.
- Evitar las actividades físicas intensas en las horas de más calor.
- Permanecer en lugares frescos y ventilados.
- Tomar duchas o baños fríos.
- Vigilar a los niños pequeños y adultos mayores.
Por Manuel Escalante