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Las secretarías de Agricultura, Economía y Trabajo continúan la convocatoria para que los negocios del sector se sumen al Acuerdo Nacional Maíz-Tortilla. Esta iniciativa federal busca reducir el precio de la tortilla en un 5 por ciento durante los próximos seis meses.

Las dependencias promueven la Prosperidad Compartida para elevar el bienestar de la población mexicana y garantizar de manera efectiva el derecho constitucional a la alimentación nutritiva y de calidad.

Objetivos y metas del programa federal de alimentación

Esta estrategia integral forma parte de los 100 compromisos de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. Por consiguiente, el gobierno diseña este esquema para impactar positivamente en el gasto diario de los hogares. No obstante, la disminución del costo final ocurrirá de forma paulatina según evolucionen las circunstancias actuales del mercado nacional.

Los establecimientos que operen bajo la formalidad legal tienen la oportunidad de inscribirse para obtener diversos estímulos económicos y operativos que fortalecen su competitividad.

En el estado de Yucatán, la tortillería La Lupita ya formalizó su participación en este esfuerzo institucional. Su propietario, Don Wilbert Zapata, señaló que él "confía en este esfuerzo que fortalece la economía y la soberanía alimentaria e invita a que más establecimientos de este giro se sumen al programa".

En este sentido, la colaboración de los productores locales resulta una pieza fundamental para alcanzar la meta de soberanía alimentaria en todo el territorio yucateco.

Requisitos e incentivos económicos para los establecimientos

Los participantes que cumplan con los criterios de registro accederán a un cupo de hasta 25 mil toneladas de maíz blanco. Las autoridades fijaron un precio preferencial de 6 mil pesos por tonelada de grano para los integrantes del acuerdo. Además, el personal oficial realiza la entrega del insumo directamente en los Centros de Acopio de Alimentación para el Bienestar. Asimismo, los dueños de los negocios obtendrán rebajas especiales en la adquisición de harina de maíz nixtamalizado.

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Adicionalmente, el convenio facilita el acercamiento a la red de intermediarios financieros que operan con los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA). Esto permite que los pequeños empresarios mejoren su liquidez y modernicen su maquinaria. Por otro lado, las tortillerías que se incorporen recibirán un distintivo oficial que las acreditará como negocios adheridos, símbolo de compromiso social y precio justo.

Inclusión laboral y visibilidad del comercio formal

Otro eje relevante del acuerdo reside en la vinculación con el programa Jóvenes Construyendo el Futuro. Los locales funcionarán como centros de trabajo para capacitar a personas interesadas en aprender los procesos técnicos de la industria. Al finalizar la etapa de formación, el gobierno federal otorgará una certificación de competencias que avalará los conocimientos del personal capacitado.

En consecuencia, las unidades económicas aparecerán en el directorio nacional de tortillerías con precio justo. Esta plataforma digital permite que los consumidores ubiquen rápidamente los locales que ofrecen el producto bajo las condiciones del acuerdo. De esta manera, las autoridades consolidan un sistema que vincula la producción agrícola con el consumo popular para proteger el bolsillo de las familias mexicanas.