Demanda de electricidad para centros de datos impulsada por la inteligencia artificial
El consumo eléctrico de los centros de datos experimentará un aumento significativo en los próximos años.
Según un informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), esta demanda se duplicará con creces hacia 2030, impulsada principalmente por la inteligencia artificial (IA).
Crecimiento exponencial de la demanda de electricidad
En 2024, los centros de datos representarán aproximadamente el 1,5% del consumo eléctrico mundial, con 415 TWh.
Sin embargo, este crecimiento es exponencial, y se espera que para 2030, el consumo se duplique con creces, alcanzando los 945 TWh. Esto representará cerca del 3% del consumo total mundial de electricidad.

Fatih Birol, director ejecutivo de la AIE, señaló que Estados Unidos, Europa y China concentran actualmente el 85% de la demanda mundial de electricidad para estos centros. En países como Estados Unidos, casi la mitad del crecimiento de la demanda eléctrica desde ahora hasta 2030 será impulsado por los centros de datos.
Desafíos en el suministro de electricidad
Una de las principales dificultades radica en el suministro de electricidad suficiente y asequible. La AIE prevé que se utilizarán diversas fuentes de energía para cubrir la creciente demanda de los centros de datos, incluyendo el carbón, que actualmente representa el 30% del consumo eléctrico de estas instalaciones.
Sin embargo, se espera que las energías renovables y el gas natural sean las principales fuentes debido a su competitividad en costes y su disponibilidad.
Impacto en las emisiones de CO2
El aumento de la demanda de electricidad llevará inevitablemente a un incremento de las emisiones de CO2. Se estima que las emisiones crecerán de 180 millones de toneladas actuales a 300 millones de toneladas en 2035, lo que representa un pequeño porcentaje (menos del 1,5%) de las emisiones del sector energético.
Aunque algunos analistas, como Euan Graham de Ember, señalan que las energías renovables y el almacenamiento en baterías pueden mitigar este impacto, la adopción de la IA y la eficiencia energética podrían contrarrestar las emisiones adicionales, aunque no hay certeza sobre la efectividad de estas soluciones.
AFP