Foto: Guillermo Castillo

Llegaron primero a Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, donde fueron interceptados por las autoridades migratorias

Un grupo de 16 venezolanos, entre ellos nueve menores de edad y siete adultos, permanece en condiciones precarias en el parque de la colonia México, en Mérida, frente a las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM).

Desde hace seis días, acampan en este lugar en espera de una solución a su situación migratoria.

Buscan el sueño americano

El grupo comenzó su travesía hace dos meses desde Venezuela, buscando llegar a Estados Unidos en busca del sueño americano. 

Tras un largo viaje en autobús, llegaron a Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, donde fueron interceptados por las autoridades migratorias. 

Según los testimonios, les prometieron trasladarlos a la Ciudad de México, pero finalmente fueron enviados a Mérida.

“Migración nos dijo que nos llevarían a Ciudad de México, pero no fue así. Engañados acabamos aquí en Mérida. Queremos seguir nuestro viaje al norte y pedir asilo en Estados Unidos por la difícil situación en nuestro país”, explicó Yuleisy Ramírez, una de las migrantes.

Ramírez detalló que están a la espera de su cita formal ante el INM, pero hasta ahora no han recibido respuesta a su solicitud. 

Los documentos entregados por las autoridades migratorias, que supuestamente les permitirían trasladarse a un punto más cercano a su destino, parecen estar diseñados para su retorno a Venezuela, una posibilidad que rechazan.

El grupo, que inicialmente estaba compuesto por 83 personas, se ha reducido a 16 migrantes acampando en Mérida, mientras que otros 43 han continuado hacia diferentes puntos del país. 

Sin embargo, su intención principal es llegar a la Ciudad de México para acercarse a la frontera norte y gestionar un posible asilo en Estados Unidos, argumentando que huyen de condiciones insostenibles en su país de origen.

Venezolanos que viven en Mérida se solidarizan

Ramírez destacó que, después de varios días en Mérida, sus recursos económicos se están agotando. 

Han sobrevivido gracias al apoyo de otros venezolanos radicados en la ciudad, quienes les han proporcionado alimentos, ropa, medicamentos y pañales para los niños.

“Nos han traído ropa, pañales, medicamentos para los niños. Pedimos a las personas que nos ayuden a avanzar, porque nos han traído hasta aquí y no podemos salir”, comentó la venezolana.

Alta probabilidad de regresar a Venezuela

El grupo desconoce cuándo las autoridades de migración responderán a su solicitud, temiendo que su único desenlace sea el regreso a las condiciones de precariedad que los llevaron a migrar.

Este caso refleja la complicada situación que enfrentan los migrantes venezolanos en tránsito por México, así como la necesidad urgente de políticas públicas más humanitarias y eficaces para atender a este sector vulnerable.

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