Yucatán inició la reactivación de sus actividades económicas y cotidianas luego de que pasó el peligro del huracán Milton, tras la evaluación del impacto hecho por el Consejo Estatal de Protección Civil.
En la sesión del Comité de Emergencia, encabezada por el gobernador Joaquín Díaz Mena, se acordó la reanudación de todas las actividades económicas, el regreso a clases y la reapertura gradual del transporte público.
El transporte público comenzó a operar de manera escalonada desde la mañana de ayer, mientras que la Ley Seca, que había sido implementada para evitar situaciones de riesgo durante la contingencia, fue levantada a partir de las 17:00 horas.
Asimismo, se informó que el aeropuerto internacional de Mérida, Manuel Crescencio Rejón, reabrió sus operaciones a las 9:00 horas, luego de haber estado suspendido por casi 24 horas debido a las condiciones climatológicas adversas.
Con esto, los vuelos comerciales y de carga empezaron a retomarse, normalizando el tránsito aéreo tanto para los habitantes como para los visitantes que quedaron varados en la ciudad.
Durante la sesión del Comité de Emergencia, Díaz Mena destacó la rápida actuación de los organismos de protección civil, quienes lograron prevenir mayores daños y pérdidas humanas.
El mandatario resaltó la importancia de la cooperación ciudadana en este tipo de situaciones, destacando la participación activa de la población en las evacuaciones preventivas.
Cerca de 6 mil personas fueron trasladadas a refugios temporales, principalmente en municipios costeros como Sisal, Celestún, Telchac Puerto y Progreso, donde las afectaciones fueron mayores.
Aunque en el primer balance de los daños se destacó un saldo blanco en cuanto a vidas humanas, se reportó que Celestún fue la localidad más afectada, con zonas que permanecen inundadas y requieren atención urgente para drenar el agua acumulada.
Equipos de rescate y personal de limpieza ya se encuentran trabajando en la zona para restablecer el orden y permitir que los habitantes regresen a sus hogares con seguridad.
En su intervención, Díaz Mena destacó la importancia de continuar fomentando la cultura de la protección civil en el estado.
El gobernador reiteró que la coordinación entre la ciudadanía y las autoridades es esencial para enfrentar fenómenos naturales como el huracán Milton. Hizo hincapié en que la preparación y el cumplimiento de las medidas preventivas son factores clave para reducir los riesgos y daños asociados a estos eventos climáticos.
El despliegue de las Fuerzas Armadas, la Marina y la Secretaría de Seguridad Pública jugó un papel crucial en la logística de evacuaciones y en la seguridad de las zonas más vulnerables.
Las autoridades reconocieron el trabajo conjunto entre los diferentes niveles de gobierno y la sociedad civil organizada para proteger a la población.
Díaz Mena aseguró que el gobierno estatal mantendrá la vigilancia en las zonas más afectadas para garantizar que la ayuda llegue a quienes más lo necesitan, sobre todo en comunidades rurales y costeras que todavía enfrentan desafíos derivados del paso del huracán.
Las autoridades han solicitado a la población que continúe reportando cualquier situación de riesgo o emergencia para que las brigadas correspondientes puedan actuar de inmediato.
En la capital del estado, las afectaciones fueron mínimas en comparación con otros municipios.
Hasta esta edición, el Ayuntamiento de Mérida informó que se recibieron 470 reportes de daños menores, de los cuales la mayoría estuvieron relacionados con la caída de ramas y árboles, postes y cables eléctricos derribados, así como encharcamientos en algunas vialidades.
Las zonas más afectadas por la falta de suministro eléctrico incluyeron colonias como Francisco de Montejo, Chuburná de Hidalgo, Yucalpetén y Lázaro Cárdenas, donde las brigadas de la Comisión Federal de Electricidad trabajan para restablecer el servicio.
Cecilia Patrón, alcaldesa de Mérida, realizó un recorrido por las comisarías de Tamanché, Xcunyá, Santa María Chi y Yaxché Casares, donde supervisó las labores de limpieza y retiro de escombros.
La funcionaria informó que 143 personas ingresaron a los refugios temporales habilitados en la ciudad y que el gobierno municipal está trabajando en la verificación de sus viviendas para garantizar un retorno seguro.
El proceso de retorno se realizará una vez que se confirme que las condiciones de sus hogares son adecuadas para evitar riesgos adicionales.
El proceso de limpieza y recuperación se estima que tardará varios días, especialmente en las zonas que registraron inundaciones significativas, como es el caso de Celestún. Las autoridades locales y estatales trabajarán de la mano con las comunidades para restablecer los servicios básicos y asegurar la pronta normalización de todas las actividades.
Con el peligro del huracán Milton ya superado, Yucatán avanza hacia la recuperación, con la convicción de que la preparación y el trabajo en conjunto son fundamentales para superar los retos que plantean este tipo de fenómenos naturales.
Tomás Martín