Fotografía: Jorge X. López

Con fuertes reclamos al presidente Andrés Manuel López Obrador por no cumplir con su promesa de resolver la desaparición de sus hijos, padres de los 43 normalistas y alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa, Guerrero, instalaron por segunda ocasión en este año, un plantón en la fachada del Palacio Nacional en demanda de una reunión con el Ejecutivo federal.

Luego de marchar del Monumento a la Independencia al Zócalo capitalino sin que se registrara ningún tipo de incidente en un trayecto que duró dos horas, los padres tomaron la palabra al pie del balcón presidencial y comenzaron a emitir sus discursos.

“No tenemos ni verdad ni justicia. El mesías decía poder esclarecer nuestro caso y resulto ser un farsante”, disparó Emiliano Navarrete, consiente de donde puede causar más daño.

El padre de uno de los alumnos desaparecidos miró el cerco de vallas de tres metros de altura que rodea el Palacio Nacional, hogar de López Obrador, y descifró su significado: “es el miedo de no tener respuestas a los compromisos que ha adquirido este gobierno; el temor de que las personas que tenemos demandas no tienen respuesta”.

Sería tan fácil, dijo, que López Obrador saliera a ver qué es lo que los trae a su casa a visitarlo.
“De verdad me sorprende (las vallas), me da hasta vergüenza el tipo de cosas que hace este gobierno”, expresó Navarrete.

Enfatizó en que ellos únicamente llegaron para tener respuestas y el presidente les diga cuándo va a darles la reunión para informarles sobre su caso.

Recordó que al ver cara a cara al expresidente Enrique Peña Nieto se dio cuenta que iba a ser difícil que “ese individuo” le diera respuestas porque estaban ante un gobierno que pretendía cerrar el caso de desaparición.

“Pero llega un presidente que dice venir del pueblo, de ser elegido por el pueblo. Yo digo que tuvo hasta la suerte de que le tocó un momento de como un gobierno causó una desaparición (…) y fue elegido para tener este cambio.

“Nosotros tuvimos también una esperanza por la forma en que él se manifestó y que dio el compromiso de que habría verdad y justicia, ahí teníamos al menos un poco de esperanza de que podíamos encontrar la verdad de donde estaban nuestros hijos”, dijo Navarrete.

Recordó que al surgir líneas de investigación que apuntaba al Ejército se paró todo e incluso López Obrador comenzó a condecorar a miembros de las Fuerzas Armadas.

Fue decepcionante, comentó, ver cómo un presidente que dijo venir del pueblo y cuando exigió que la Secretaría de Defensa Nacional tenía que entregar toda la información, esta no lo obedeció.

“Porque nos pusiste una cara al principio y después nos saliste peor que Peña Nieto. No pueden extraditar a Tomás Zerón (…) hay otros dos o tres que están en Estados Unidos, ahí exiliados y tampoco los han podido traer”, condenó Navarrete.

Por su parte, Melitón Ortega, vocero de los padres de los estudiantes- reconoció que López Obrador cumplió con el regreso de expertos y conformó también la Comisión Especial del caso Ayotzinapa y se conformó otra más integrada por los padres, Alejandro Encinas y los expertos.

Recordó que se firmó, con presencia de los padres el acuerdo por el cual se obligaba a todas las instituciones a dar la información sobre el caso.

“En el camino sentimos había pequeños avances hasta que se topó con el tema del Ejército, fue donde los padres se dijeron el Ejército no había dado toda la información”, apuntó.

Al día de hoy, lamentó Ortega, no se ha avanzado más y el Gobierno federal, en lugar de hablar ha desviado la atención y están en contra de la afirmación de López Obrador de que el Ejército ha entregado toda la información.

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