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La mala alimentación, el sedentarismo y el consumo excesivo de azúcares son algunas de las causas identificadas.

La diabetes mellitus se ha convertido en un problema de salud pública de gran magnitud en Yucatán. Según una investigación de 24Horas Yucatán, afecta a 294,754 personas mayores de 20 años de edad dentro del rango de Población Económicamente Activa (PEA), lo que representa el 12.7% de esa población.

Este número de enfermos constituye aproximadamente una cuarta parte de los 1,200,000 habitantes en la PEA de Yucatán, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) de 2020. Yucatán ha escalado del quinto al tercer lugar nacional en cuanto a la prevalencia de esta enfermedad.

Entre 2014 y 2020, el número de yucatecos con diabetes mellitus aumentó de 206,394 a 294,754, lo que significa un incremento de 88,360 pacientes.

De acuerdo con especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la diabetes mellitus está vinculada a estilos de vida poco saludables, como la obesidad, el sedentarismo y una dieta rica en azúcares y grasas, así como a predisposiciones genéticas.

Antes de que la diabetes se manifieste, suele haber una condición médica previa llamada “prediabetes”, donde los niveles de glucosa en sangre son superiores a lo normal pero no lo suficientemente altos como para diagnosticar la enfermedad. Las complicaciones de la diabetes mellitus pueden ser graves e incluyen enfermedades cardiovasculares, enfermedad renal crónica, neuropatía diabética, retinopatía diabética y pie diabético, entre otras.

Según datos del Inegi, en el año 2022 se registraron 1,371 defunciones por diabetes mellitus en Yucatán. Es crucial tomar medidas preventivas y de control para combatir esta enfermedad y sus devastadoras consecuencias.

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