Impactará al estado el calor, dicen expertos, será histórico.

Por Manuel Escalante

Yucatán enfrentará calor sin precedentes a nivel histórico debido al cambio climático y al fenómeno meteorológico El Niño, que también impacta a nivel global, con sequías extremas, desabasto de agua, enfermedades y crisis también en producción de alimentos, pues el campo ya no produce porque hay escasez de lluvias.

Desde 2023, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) alertó sobre el fenómeno El Niño, que se mantendrá activo hasta 2027, por lo que la región experimentará una sequía intensa y temperaturas que podrían superar los 45 grados centígrados.

Esta grave situación se debe a la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera, intensificada por el declive del fenómeno de El Niño.

El pronóstico para 2024 para Yucatán es preocupante, pues se pronostica una temporada pico de sequía para la segunda quincena de abril y todo mayo, las temperaturas podrían superar los 50 grados centígrados y la persistencia de frentes fríos hasta mediados de mayo podría generar condiciones meteorológicas severas.

Autoridades meteorológicas pronostican al menos cinco olas de calor a nivel global durante el año, con periodos de varios días con temperaturas extremadamente elevadas, pues la combinación de calor y humedad generará una sensación térmica aún más sofocante, que podría rondar los 50 grados en algunas semanas. Además, señalan que en áreas urbanas como Mérida, la falta de áreas verdes por la urbanización agrava el problema, ya que la vegetación ayuda a regular la temperatura.

“Las temperaturas más altas siempre se dan en las grandes manchas urbanas del Estado, principalmente en Mérida, con su gran plancha de concreto, pavimento y falta de árboles”, aseguró Juan Vázquez Montalvo, experto en meteorología por la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY).

Precisó que dentro de Mérida las zonas más calientes son las del norte, el poniente y el centro de la ciudad. Las menos calientes son el sur y el oriente de la capital yucateca debido a que hay cobertura de árboles o zonas verdes existentes.

El experto aseguró que de acuerdo a los modelos matemáticos de predicción el calor y la sequía vienen fuertes, debido a dos factores importantes que la acompañarán: el fenómeno de “El Niño” (que ya está en decadencia y deberá terminar en marzo), e inmediatamente ingresamos a la fase neutra para abril y mayo.

“Se espera que la sequía sea fuerte, pero sin descartar aún la presencia de algún frente frío que pueda llegar a la zona, ya que estos no han finalizado, sino que lo harán hasta el próximo 15 de mayo, por lo que la posible afectación de alguno de ellos está latente”, apuntó el experto.

Las olas de calor no solo son un problema en Yucatán, sino en todo el mundo. México enfrenta una ola de calor histórica, parte de una tendencia global hacia temperaturas extremas.

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