FOTOGRAFÍA: AGENCIA QUADRATÍN

Más de 30 trabajadores jubilados de Pemex protestaron nuevamente por la falta de los servicios médicos en Yucatán a los que tienen derecho, por lo que señalaron que esta política de retirar servicios subrogados a particulares, los ha dejado a ellos y sus familias sin acceso adecuado a la atención médica.

Los manifestantes que se apostaron en la calle 60 y avenida Cupules, señalaron que desde que la actual administración asumió el cargo, los servicios subrogados de salud para los trabajadores jubilados de Pemex han sido objeto de controversia. Por ejemplo, la clínica ubicada en Francisco de Montejo, que anteriormente brindaba atención prioritaria de primer contacto, ha experimentado cambios significativos.

Ahora, en lugar de ofrecer servicios integrales, los jubilados se enfrentan a una situación precaria. La clínica subrogada en Francisco de Montejo, que alguna vez fue un recurso vital para los jubilados de Pemex, ahora solo proporciona atención básica.

Para casos más graves, se les instruye a dirigirse al Hospital de Ciudad del Carmen. La situación financiera de Pemex es crítica pues enfrenta una quiebra inminente, y los proveedores han estado esperando pagos atrasados durante más de medio año. Acusaron los manifestantes que la calidad del servicio médico que alguna vez fue un sello distintivo de Pemex ahora está restringida.

En Yucatán, donde no existe una fuerte presencia administrativa o de campo, los servicios médicos son limitados. Candelario Fuentes, uno de los jubilados presentes en la manifestación, expresó su frustración: “Nos dicen que si nos sentimos mal, debemos ir al hospital en Ciudad del Carmen. Pero ¿qué pasa con aquellos de nosotros que vivimos aquí en Mérida? ¿Dónde está nuestro derecho a una atención médica digna?”

Los jubilados de Pemex exigen una solución urgente: “La empresa debe reconsiderar su política de retirar servicios subrogados a particulares y garantizar que aquellos que dedicaron años de servicio a la compañía no sean abandonados en su hora de necesidad”, señaló José Candelario Nava, jubilado de 65 años y más de 40 en la empresa.

Desde enero de 2019 comenzaron las inconformidades por la acotación del servicio médico en Yucatán para personal de Pemex. La política de la empresa fue dar la atención en los hospitales de la paraestatal y los servicios externos quedarían a la mínima expresión. A partir de entonces han sido recurrentes las quejas de jubilados.

SITUACIÓN PRECARIA

DERECHOS. Los trabajadores señalan que no se están respetando sus derechos laborales.

  • Desde enero del 2019, las inconformidades comenzaron por la acotación del servicio médico en Yucatán.
  • En quiebra, las finanzas de la paraestatal son críticas, pues enfrenta una quiebra inminente.
  • Los trabajadores exigen se les garantice el servicio de salud, además de los medicamentos.
  • Servicio subrogado: En algunos casos más graves, se les instruye a dirigirse al Hospital de Ciudad del Carmen, Campeche.
  • Hasta hace unos años, la política era dar atención en hospitales particulares.

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