CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 29 (EL UNIVERSAL).- Este viernes se celebra el Día Mundial del Corazón, por lo que la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados convocó a expertos de las principales instituciones públicas de México al foro “Insuficiencia Cardiaca” para analizar los principales desafíos en el diagnóstico y atención de la enfermedad, así como para plantear propuestas de solución a fin de mejorar las políticas públicas en la materia.
Durante su mensaje de inauguración del foro, el diputado Éctor Ramírez Barba, secretario de la Comisión de Salud de la Cámara, compartió algunos datos clave sobre el panorama de la Insuficiencia Cardiaca a nivel internacional y en México:
A nivel mundial, la insuficiencia cardiaca se ha definido como una pandemia global, pues afecta a alrededor de 26 millones de personas.
Aunque los datos sobre la insuficiencia cardiaca son escasos en México, se estima que entre 2.4 y 3 millones de mexicanos padecen esta condición, y esta tendencia sigue creciendo cada vez más.
La mortalidad de dicha enfermedad se estima en 50 mil casos al año y es una de las primeras causas de internamiento de urgencias en personas mayores de 65 años.
La alarmante estadística revela que siete de cada diez personas en México viven con sobrepeso u obesidad, tres de cada diez tienen hipertensión y dos de cada diez tienen diabetes tipo dos. Estos factores de riesgo aumentan significativamente la probabilidad de desarrollar insuficiencia cardiaca.
De acuerdo con los expertos, la Insuficiencia Cardiaca (IC) no recibe la atención necesaria en el sistema de salud pública, por lo es vital contar con un registro oficial que permita conocer el número de personas que padecen enfermedades cardiovasculares y específicamente cuántas presentan esta condición.
Asimismo, coincidieron que la mayor parte de la población afectada se encuentra en el primer y segundo nivel de atención de las instituciones públicas de salud y cuando llegan al tercer nivel y finalmente son diagnosticados ya es complicado tratar la enfermedad e incluso quienes la padecen enfrentan un mayor riesgo de morir.
Por lo que es urgente identificar a los pacientes con riesgo de IC desde el primer nivel de atención para lo cual es necesario contar con protocolos de atención y capacitación al personal médico.
Señalaron que las necesidades del paciente con Insuficiencia Cardíaca son: diagnóstico oportuno y completo, acceso a terapias, educación y seguimiento, rehabilitación cardiaca, atención a descompensaciones y acceso a terapias avanzadas.
Los pacientes con IC necesitan: Más años de calidad de vida con menor costo como objetivo de las políticas públicas; programas de apoyo para las personas que viven con IC; prevención, desde antes de nacer y hacia adelante y colaboración entre actores de la sociedad.
Otro de los principales desafíos que refirieron los expertos es que los tratamientos farmacológicos lleguen a las unidades médicas, ya que normalmente son los médicos quienes tienen que gestionar que se los envíen.
Finalmente, concluyeron que es necesario declarar a la insuficiencia cardiaca como prioridad de salud pública nacional; convocar a los actores necesarios para lograr un abordaje integral y oportuno de la IC; formar un grupo de trabajo que elabore un Plan de Acción Enfocado al diagnóstico temprano y con ello realizar un proyecto legislativo que pueda implementarse en todo el país y que sea sostenible en el tiempo.
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