Los artesanos de joyería han experimentado un aumento significativo del 30% en sus ventas. La demanda de collares, pulseras y otros productos es muestra clara de la reactivación en las ventas, informó Diego Cruz, quien se instala en el Parque de la Madre en Mérida.
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Indicó que los souvenirs hechas a mano con detalles de piedras preciosas son las preferidas de los visitantes, “se llevan un poquito de Yucatán con algunas pulseras con el nombre de Mérida o personalizados con sus propios nombres al igual con alguna piedra o cuarzos de la región para eso de las energías”.
Dijo que el período vacacional de verano suele ser una temporada propicia para el turismo y las compras, lo que podría explicar el aumento en las ventas, “esperamos que esta tendencia positiva continúe y que los artesanos sigan prosperando en su trabajo, ya que su talento y creatividad son valiosos para la industria de la joyería-artesanal y para aquellos que aprecian las piezas únicas y hechas a mano”.
En cuanto al regateo, precisó que hoy en día es poco común que los turistas menosprecien su trabajo y que por el contrario, pagan un precio justo por cada pieza artesanal, “ya no hemos notado que quieran que les bajemos los precios, no se quejan, algunos si pero la gran mayoría paga lo que es, eso nos conviene porque años anteriores si nos trataban de bajar el producto a con precios por los suelos”, finalizó.