Con extraordinaria habilidad, Juan Rocha dobla y entrecruza las ramas de la palma de huano para hacer una variedad de figuras que tienen relación con el Domingo de Ramos y la Semana Santa en general.
Él está especialmente concentrado ante la solicitud de varios fieles católicos que quieren la figura que él llama “el manto de la Virgen”, y que ya se ha agotado.
De manera que toma un pedazo de palma de huano y se da la tarea de elaborarlo en el momento, con una habilidad sorprendente, por lo que en menos de cinco minutos la persona ya tiene en la mano la figura. Y llega otro cliente, que quiere lo mismo… “ahora se lo hago”, indica.
Juan es uno de los varios vendedores que ayer, en el Domingo de Ramos, se apostaron a las puertas de la S.I. Catedral para vender los productos que elaboran con la palma de huano.
Desde hace 10 años aprendió a realizar la variedad de figuras que hoy ofrece, pues su padre y su madre se dedicaron a esto mismo durante unos 20 años, y aprendió de ellos, cuenta.
Acudían a vender a las puertas de la Catedral, tal como él lo hace en la actualidad, lo que le causa una doble satisfacción.
Aunque aprendió a realizar las figuras de palma de huano hace una década, no fue sino hasta hace tres años que Juan Rocha comenzó a hacerlas para vender, una vez que sus padres se retiraron y le dejaron la tradición.
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Eso sí, sólo lo hace en Semana Santa y el resto del año se dedica a otras actividades relacionadas con el comercio.
Sobre las figuras que elabora, manifiesta que hace la figura de Cristo en la cruz que le lleva unos 5 o 6 minutos elaborar; la espiga de la abundancia, que es una de las más solicitadas, y que lleva sus espigas en la parte superior que hace en unos 4 minutos; y “el manto de la Virgen”, que es totalmente tejido, lo hace en 5 minutos o menos.
Una vez armada la figura les agrega una estampa de la Virgen, de Cristo o de algún santo incluso una cruz hecha con la misma palma, en el caso de la figura de “el manto de la Virgen”.
La práctica es lo que le permite elaborar las figuras con mucha rapidez. Siente que al hacer esto, se le da un valor agregado a este símbolo religioso del Domingo de Ramos.
Comparte que cada vez es más difícil encontrar el huano para trabajar, “antes era muy fácil, pero ahora no”. Suelen buscarlo en las colonias de la ciudad o incluso fuera, y cuando encuentran una planta tienen que pedir permiso para cortarla, y no siempre se lo dan.
Para esta labor, el huano debe estar fresco para que sea más sencillo moldearlo.