REDACCIÓN
La ingesta de bebidas azucaradas y carbonatadas ubica al estado entre los primeros lugares a nivel nacional e internacional, lo que genera altos niveles de glucosa y trastornos serios en el aparato urinario y, por ende, complicaciones serias de salud.
Se dispara ingesta de bebidas azucaradas
El consumo de este tipo de bebidas es de 100 litros por habitante al año en Yucatán, advirtió la nutrióloga Delia Sansores Esparza, factor determinante tanto en la litiasis renal, cálculos o piedras en los riñones, obesidad y diabetes.
Cabe señalar que la prevalencia de litiasis urinaria es mayor en el estado respecto a las estadísticas nacionales. Además, la dureza extrema del agua empleada para el consumo humano y antecedentes familiares de la enfermedad se agregan como factores de riesgo.
Los urólogos Mario Basulto Martínez y Alfredo Medina Ocampo, del Departamento de Urología del Hospital Regional de Alta Especialidad (HRAE) de Yucatán, afirmaron en su estudio titulado “Litiasis renal. El empedrado camino de la salud en Yucatán”, que el estado ocupa primer lugar nacional desde hace 35 años en estos casos.
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Ante esto, las opciones son el agua embotellada, sustitutos o cítricos de los huertos familiares, como naranja, lima y limón, combinadas en porciones medias de agua; también, moderar la ingesta de carnes, consumir verduras, evitar la vida sedentaria y caminar cuando menos media hora todos los días.
En Mérida, además, alrededor del 13% de la población padece algún tipo de diabetes, reveló Ildefonso Machado Domínguez, director de Salud y Bienestar Social del ayuntamiento de Mérida.
Lo anterior ubica a la capital yucateca por arriba de la media nacional, que es del 12%, agregó.
Esta situación se complica debido a que los yucatecos tiene la costumbre de desayunar refrescos, lo que representa una auténtica “bomba” para el sistema digestivo, particularmente a los riñones y el hígado, indicó Sansores Esparza.
Además, el cuerpo no tiene la capacidad para procesar grandes cantidades de azúcares, lo que propicia almacenamiento de glucosa y otras sustancias tóxicas, lo que deriva en obesidad y problemas renales, litiasis o urolitiasis e incluso otros trastornos como problemas cardiovasculares e infartos.
Una encuesta realizada entre cinco mil 832 residentes en Yucatán arrojó que 323 personas (5.5%) presentaban litiasis definitiva y 282 con litiasis probable, lo que representa más de un 10% con presencia en menores de 18 años (1%) y adultos mayores de 50 (hasta 11.3%).