A pesar de que representantes de organizaciones y pobladores de Kinchil reprochan la operación de la granja de cerdos Kekén, el alcalde Carlos Valentín Pech Dzib refirió que mantiene una postura imparcial en el conflicto, pues “prácticamente todos contaminamos”.
Si bien colectivos ecologistas y habitantes de la demarcación se han manifestado en contra de la planta porcícola por supuestos daños al medio ambiente, el munícipe aseguró que tiene una relación imparcial con los dueños de la empresa.
“Nosotros como comunidad, como alcalde decidí quedarme en medio para escuchar ambas partes”, recalcó.
No obstante, agregó, activistas y ciudadanía están en su derecho de manifestar su postura en contra de la granja, que actualmente opera en la región y que, acusan, perjudica el ecosistema y la salud de la población.
Pech Dzib argumentó que su postura neutral responde a una situación de costo, riesgo y beneficio; en el sentido de que la granja también es una fuente de empleos para las personas que viven en las inmediaciones.
Comentó que la responsabilidad de probar si efectivamente la granja con 60 mil cerdos es contaminante o no está en el terreno de las dependencias medioambientales federales o estatales.
Empero, subrayó, como ayuntamiento se aseguran de que las empresas cumplan con los permisos estipulados.
Sostuvo que la comunidad se encuentra en paz por este tema y que tienen en cuenta la contaminación.
“Prácticamente todos contaminamos, todos tenemos fosas en las casas, tenemos nuestros usos y costumbres de años y hoy en día no sólo Kinchil, sino todo el estado tenemos riesgo de contaminación”, indicó.
Pobladores solicitan que se amplíe tramo carretero Celestún- Kinchil
Pech Dzib puntualizó que la instalación de esa empresa no se encuentra en Kinchil, sino más bien es jurisdicción de Maxcanú.
“Se llaman granjas Kinchil, pero en realidad pues son del municipio de Maxcanú”, concluyó.
Cabe recordar que recientemente el Consejo Maya “Chikin Haa” expuso la problemática de las granjas porcícolas en Yucatán ante el Congreso Nacional por la Defensa del Agua, celebrado en Torreón, Coahuila.
El vocero de dicha organización, Alberto Rodríguez Pisté, acusó que Grupo Porcícola Mexicano se vale del poder económico para silenciar a las autoridades e incluso a otrora activistas por el medio ambiente, especialmente para mantener la operación en Kinchil, la granja más grande de Kekén en la entidad.
Síguenos en nuestras redes sociales ??