Guillermo Castillo
Debido a las deficiencias en el transporte público, el parque vehicular en la ciudad de Mérida y su zona conurbada se ha cuadruplicado, ya que muchas personas dejan de usar los camiones como medio principal de transporte y los cambian por motocicletas, así lo advirtió Eduardo Monsreal Toraya, analista del Observatorio y Movilidad Sostenible de Mérida.
Se cuadruplica parque vehicular en 20 años
El especialista informó que de acuerdo con la estadística de vehículos de motor registrados en circulación, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), entre 2000 y 2020 el parque vehicular de la zona metropolitana aumentó cuatro veces, mientras que, en ese mismo periodo, la población incrementó únicamente 1.5%.
Del universo total registrado por el Inegi de vehículos con motor -730 mil 788-, 64.3% corresponde a automóviles, mientras que 21.3% restante son motocicletas. Para entender un poco del crecimiento en este lapso de los vehículos ligeros, basta con precisar que en 2020 el segmento de este tipo de medio de transporte incrementó 9.6 veces ya que pasó de 16 mil 472 en 2000 a hasta 155 mil 370 en 2020.
Ante este panorama, el especialista Monsreal Toraya confirmó que las tasas de motorización de quienes se vuelven motociclistas crecen mucho más rápido que quienes compran un automóvil. Consideró que este comportamiento de la sociedad surge como respuesta a una deficiencia en el servicio del transporte público.
Crecen 9.6% ventas de vehículos ligeros en agosto
Detalló que esta situación se hace más evidente en los municipios de la Zona Metropolitana de Mérida, como pudiera ser Conkal y Kanasín.
“En estos municipios conurbados la provisión y accesibilidad a rutas de transporte público es mucho más limitada, se trata de zonas dispersas, distantes, lejanos de los principales centros de servicios”, indicó.
El especialista explicó que en ausencia de un servicio de transporte público adecuado se ven prácticamente obligados a comprar una motocicleta como un vehículo de transporte cotidiano; inclusive se suele utilizar como un medio para transportar a la familia.
En tal sentido, recordó que es común ver en diversos puntos de la ciudad motocicletas que las personas sobrepasan la capacidad de servicio, ya que van familias de más de tres integrantes a bordo del vehículo ligero.
Indicó que por las necesidades económicas de personas que viven en la zona conurbada de Mérida, su primera opción es adquirir una motocicleta, abonando en ese sentido al parque vehicular por demás ya numeroso.
“Si no hacemos nada al respecto, las tasas de motorización van a ir aumentando”, advirtió.
Comentó que actualmente la tasa de motorización en Mérida y su zona metropolitana se encuentra en 1.8 por cada habitante con tendencia a la baja. Expuso que lo que pasa con el uso de la motocicleta es particularmente preocupante porque se come la cuota de las personas que deberían estar utilizando el transporte público, pero que deciden no hacerlo por las deficiencias que sistemáticamente tiene este servicio.
Consideró que para revertir estos datos es necesario fortalecer el servicio de transporte masivo, con la finalidad de que el ciudadano elija este sobre el automóvil o como es el caso aquí expuesto, la motocicleta.
Asimismo, externó que se necesita fomentar la multimodalidad, es decir, que se le dote a la infraestructura a los transportes públicos para que estos tengan la capacidad de mover bicicletas de los usuarios, con la idea de que el último tramo hacia sus destinos sea por medio de este medio.
“Implica el trabajo coordinado entre el gobierno del estado, el cual es el encargado del sistema de transporte y los municipios que se encargan de administrar los desarrollos inmobiliarios, donde habitan las personas”, concluyó.