A casi 10 meses de administración municipal, habitantes de las colonias de la CROC y Cuauhtémoc en Kanasín, manifestaron sentirse desilusionados después del mantenimiento que la Comuna dio al parque infantil.
Y es que, en semanas pasadas, empleados del Ayuntamiento pintaron, barrieron y limpiaron el parque infantil; sin embargo, los captores de agua de lluvia continúan sin tapas, lo que es un riesgo para peatones y vehículos.
Vecinos como Alejandra Piña, ama de casa, no ocultaron su desilusión: “cuando vimos la cuadrilla de trabajadores pensamos que iban a arreglar
Reclaman atención habitantes de la colonia Jacinto Canek
parejo, pero sólo se limitaron al parque”. La señora Piña recordó que esta cavidad, a un lado de la calle, ha sido motivo de accidentes, tanto de personas como de vehículos que han caídos en ese punto: “por eso tuvimos que conseguir llantas para taparlo”, puntualizó.
Por su parte, Angélica Puerto, pobladora de la CROC, comentó: “seguramente el dinero solo alcanzó para pintar el parque, porque el hueco donde se caen las personas sigue abierto desde que algún vándalo se robó la tapa”.
Incluso, la vecina señaló que los tiraderos de basura en los alrededores persisten, y, aunque ocasionalmente habían sido limpiados por trabajadores de la Comuna, esto no ha sucedido recientemente.
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“Pensé que cuando vinieron los trabajadores limpiarían todo, pero no se llevaron el tiradero de basura de alrededor y la peste que ocasiona la seguiremos respirando”, dijo.
Este tiradero de basura puede notarse a lo largo de la calle 28, donde se encuentra el cárcamo de agua potable, hasta la calle 19.
Las entrevistadas señalaron que vecinos sin escrúpulos abandonaron sus bolsas llenas de basura y desperdicios en la vía pública, ante la nula iluminación nocturna en la zona y la inacción de las autoridades.
Por otro lado, Patricia Euán, también pobladora de la Cuauhtémoc y ama de casa, comentó que su colonia aún presenta múltiples carencias en cuanto a servicios municipales, pues no hay vigilancia para erradicar los tiraderos de basura.
“Incluso, constantemente hay focos quemados que cuando reportamos al municipio pasan semanas antes de reemplazarlas, lo que es aprovechado por algunas personas para, en medio de la oscuridad de la noche, dejar sus desperdicios y animales muertos”, señaló.
Además, Patricia recuerda con tristeza una copiosa lluvia en septiembre del año pasado, durante la cual su casa se inundó, debido a que los pozos pluviales no funcionaron, pues estaban completamente llenos de basura.
Las entrevistadas se mantienen a la expectativa de que en plena temporada de lluvias la Comuna realice el levantamiento de residuos sólidos en esta zona, así como el desazolve de pozos pluviales, pues una lluvia muy intensa podría ocasionar grandes encharcamientos como los de septiembre del año pasado.