Un grupo de empresarios inmobiliarios presuntamente realizan despojos y transacciones ilegales en Dzilam de Bravo, al parecer coludidos con trabajadores del ayuntamiento.
Acusan fraude en compraventa de terrenos en Dzilam de Bravo
Se trata de la empresa Uredi, que se dedica al giro de la construcción y cuyo domicilio registrado ante las autoridades se encuentra en la capital yucateca.
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Con base en registros del ayuntamiento de Dzilam de Bravo, un predio de más de 30 metros lineales a orilla del mar, que era de fundo legal del municipio, fue cedido a la empresa constructora; la justificación de las autoridades de ese momento es que la corporación proyectó obras de carácter social que contribuyeron a la generación de empleos y el desarrollo económico de la demarcación.
La transacción gratuita quedó asentada en la sesión que los miembros del cabildo efectuaron a finales de 2013.
Casi dos años y medio después, en abril de 2016, la empresa vendió el predio a directivos de otra compañía que opera en el municipio y en Progreso: Vive Energía.
Según consta en la escritura, avalada ante un notario público, el terreno pasó, en partes iguales, a ser propiedad de Benigno Villarreal del Río, José Antonio Aguilar Bueno y Gerardo Pandal Rodríguez, en una venta de poco más de mil 400 pesos por metro lineal, pues el costo total, por los 32 metros, fue de 45 mil pesos. En otras palabras, la venta del terreno fue a precio inferior al que costaría habitualmente un inmueble en dicho sitio, pues se ubica en la costa yucateca, una de las zonas más codiciadas por los inversionistas del giro.
El movimiento se realizó a pesar de que dicha transacción es ilegal, pues los inmuebles del fundo legal no pueden comercializarse sin la aprobación del ayuntamiento.
“Vive Energía es una empresa 100 por ciento mexicana, cuyos directivos a lo largo de su trayectoria profesional han sido responsables de la implementación de más de 2 mil megavatios de energía renovable y limpia en México”, según refiere la misma compañía en su sitio web.
Así pues, entre los representantes de Uredi y de Vive Energía conforman la conocida como “mafia inmobiliaria de la costa”.
REDACCIÓN