Políticos y empresarios exigen se investigue la contratación de sobrinos y parientes políticos en el Gobierno de la alcaldesa de Cozumel, Juanita Alonso Marrufo.
El Gobierno municipal de Cozumel, que encabeza Alonso Marrufo, se burla de la ciudadanía con el lema de “No mentir, no robar, no traicionar”, lo cual es a todas luces lo que presuntamente está realizando la alcaldesa con los cozumeleños al practicar el nepotismo, incrustando en la nómina a familiares cercanos con sueldos onerosos que ni los trabajadores que tienen más años en la administración pública obtienen.
Con ello, se estaría incurriendo en una violación a la Ley de Municipios del Estado de Quintana Roo, que prohíbe a los ayuntamientos “conceder empleos en la Administración Pública Municipal, a los propios miembros de los ayuntamientos, a sus cónyuges, parientes consanguíneos en la línea recta y parientes en línea colateral hasta el cuarto grado o parientes por afinidad”.
Con ese antecedente, el presidente del Partido Acción Nacional (PAN) en Cozumel, Miguel Ángel Canté Ávila consideró que el Comité de Ética y de Prevención de Conflictos de Intereses de la Administración Pública del municipio de Cozumel 2021-2024, debe tomar cartas en el asunto y en su caso turnar el caso a la Fiscalía Anticorrupción.
Por ello advirtió que, si se comprueba que se contrataron familiares de la munícipe, debe penalizarse a quienes promovieron la contratación y dar de baja a los involucrados, aunque reconoció que es un tema complicado porque ese comité está encabezado por la propia presidenta municipal.
PROTEGE A FAMILIARES
El caso que destapó las contrataciones familiares de la presidenta municipal y sus allegados fue el de Miguel Alejandro Alonso Coral, quien fue designado en los últimos meses bajo el cargo de jefe de Contratos en la Oficialía Mayor con un salario de 18 mil pesos mensuales.
El funcionario es sobrino directo de la presidenta municipal. Es hijo de Miguel Alberto Alonso Marrufo, el hermano de la alcaldesa. Su madre es Susana del Mar Coral Villanueva, presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF).
Según un reporte de transparencia del propio municipio, entre el 30 de septiembre de 2021 (día en que inició la nueva administración municipal) y el 4 de enero de 2022, tres personas más fueron contratadas en diversas áreas del ayuntamiento: Francis Eugenia y
Patricia Eugenia Marrufo Méndez. La primera es la secretaria particular de la presidenta del DIF municipal y cobra 20 mil 711 pesos mensuales.
La segunda tiene el cargo de subdirectora con un salario de 22 mil pesos mensuales. Aunque no se detalla en qué área, lo que sí está registrado es que viene de la Secretaría del Bienestar, donde estaba quien ahora es la presidenta municipal.
Junto con ellas también entró a trabajar al municipio Jorge Antonio Cárdenas Marrufo, quien fue dado de alta como asesor jurídico en la Sindicatura municipal, donde cobra 17 mil pesos al mes.
Y la lista sigue, por lo que los representantes de diversos organismos, cámaras empresariales, partidos políticos y demás, piden se investigue y castigue conforme a la propia ley.
SE DIVORCIAN
Esta situación refleja que la “luna de miel” entre la sociedad cozumeleña y el Gobierno de Juanita Alonso llegó a su fin, pues la líder municipal de la Isla de las Golondrinas, no aguantó la tentación de usar su poder y con ello violar la fracción VI del artículo 67 de la
Ley de los Municipios de Quintana Roo y los artículos 47, fracciones XIV y XVIII, 48, 49 y 50 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos del Estado de Quintana Roo, las cuales prohíben a los gobiernos municipales contratar a familiares en los cargos y asuntos de gobierno.
Ahora a los cozumeleños se les cayó la venda de los ojos, quienes hartos de las prácticas de corrupción en su municipio, decidieron elegir a Alonso Marrufo por supuesta transparencia en su labor y les está pagando mal tras realizar actos de nepotismo a lo grande en su mandato.
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