Yucatán se encuentra entre las entidades con mayor número de población indígena, pero hay muchos pendientes para que se cumplan sus derechos y sus necesidades básicas, de salud, educación, acceso a la justicia, y para que se valore su cultura y no solamente sean algo exótico, destacó el agrónomo y periodista maya, Bernardo Caamal Itzá, coordinador del Colectivo Xok K’iin.
De acuerdo con el Inegi, en el censo de 2020, 983 mil 257 personas se identificaron como indígenas, en tanto 522 mil 757 son hablantes de una lengua indígena, el 99% maya hablantes.
El estado está entre las entidades federativas con mayor porcentaje de población hablante de lengua indígenas con un 23.7% de la población. Las otras entidades con más porcentaje en este sentido son Oaxaca (31.2 %), Chiapas (28.2 %) y Guerrero (15.5 %). Estas cuatro acumularon 50.5 % del total de hablantes de lengua indígena en el país.
Sin embargo, aunque Yucatán tiene una población indígena numerosa, son muchos los retos en materia de salud, por ejemplo. Solo en la pandemia, esta población de la entidad fue la más impactada del país por el coronavirus ya que hasta octubre del 2022 la entidad fue la que más casos tuvo con 2 mil 11 y 231 defunciones, de acuerdo con la Secretaría de Salud federal y el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI).
Además, el propio censo del Inegi de 2020 apunta que hubo una disminución en el número de maya hablantes en Yucatán en los últimos 10 años, pasando de 544 mil 927 personas de tres años y más que hablaban lengua indígena en 2010 a 525 mil 92 para el 2020. En porcentaje, con respecto a la población total, la cifra bajó de 29.6 a 23.7%.
Respecto a la conmemoración del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, Bernardo Caamal Itzá, coordinador del Colectivo Xok K’iin, dijo que en esta fecha mucha gente ve a las culturas originarias como aquellas milenarias que construyeron pirámides prehispánicas, y se olvidan de los pueblos actuales.
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“Yo creo que muchos solo alcanzan a percibir que la cultura maya la relacionan con las antiguas civilizaciones y se acuerdan de los mayas actuales solo cuando hacen fila en un restaurante y ven a una mujer torteando, y no dimensionan la parte gastronómica que tiene que ver con la cultura maya”, expuso.
Además, la cultura maya hoy se ve como un negocio, con una visión extractivista, pero el dinero que se genera nunca llega a las comunidades.
“Este día seguro veremos reconocimientos a la cultura maya, pero la pregunta es si realmente están trabajando para los pueblos mayas desde el enfoque de derechos, si es por los mayas de hoy o el de antes; porque el maya de hoy tiene muchos problemas”, expuso.
Dijo que se mantiene en una celebración de un día que no lleva más que a la romanización de los pueblos, cuando hay muchos retos y problemas, en salud, por ejemplo, porque cada vez hay menos que practican la medicina tradicional, además de que no hay buena atención en los centros de salud.
En lo económico, dijo que el supuesto desarrollo turístico de las entidades, ha significado solo explotación y mala paga, además de que no es que san solo trabajadores, sino que usan la figura de “lo maya”.
“Hay que dimensionar el uso de lo maya, que crea fuentes de empleo, que no se siga usando el concepto de lo maya para que se haga negocio o que el recurso regrese a las comunidades”, expuso.
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