Después de un papel protagónico en la transmisión del Super Bowl del año pasado, se espera que las firmas de criptomonedas se queden fuera del juego de 2023.
Pero el gran espectáculo publicitario anual, una especie de competencia entre los vendedores que corre paralela al campeonato de fútbol americano, presenta una variedad de compañías de cerveza y automóviles, junto con otras marcas familiares como los dulces M&M’s, que ha estado tentando su lugar desde el mes pasado. .
Anuncios del Super Bowl: cerveza dentro, criptomonedas fuera
La lista de comerciales de este año revive el éxito de culto “Breaking Bad”, cuyo elenco se reúne para lanzar chips PopCorners, así como una colaboración entre General Motors y Netflix que muestra un automóvil eléctrico navegando “Squid Games” y otros escenarios de éxitos de transmisión.
Los anuncios obtienen mucho dinero, generalmente $ 6 o $ 7 millones por 30 segundos de tiempo al aire. Eso es aproximadamente 10 veces el costo de un anuncio durante el partido de la Copa Mundial de 2022 entre Estados Unidos y Gran Bretaña.
El juego del año pasado generó $578 millones en ingresos publicitarios para NBC, $143,8 millones más que la transmisión del año anterior, según Kantar, una consultoría de marca y análisis de datos.
“Es mucho dinero para un anuncio en los medios”, dijo Derek Rucker, profesor de marketing en la Universidad Northwestern. Pero “¿dónde más puedes conseguir que 100 millones de personas vean un anuncio al mismo tiempo?”
Los anuncios se han convertido en un componente tan importante del juego en los Estados Unidos que entre “un gran número de personas, hay consumidores que miran y discuten activamente los comerciales” en las reuniones, dijo Rucker.
Manteniéndolo ligero
Celebrado cada año en pleno invierno, el “Domingo del Super Bowl” marca una ocasión para que familias y amigos se reúnan durante varias horas de competencia, jolgorio y entretenimiento.
El partido de este año será entre Kansas City Chiefs y Philadelphia Eagles. Como siempre, el programa incluye entretenimiento de primera en el medio tiempo, esta vez encabezado por Rihanna.
El comercial, que presenta a una atleta femenina rompiendo una pantalla que muestra la figura del “Gran Hermano”, se basa en la famosa novela de George Orwell y concluye con la promesa de que la llegada de la computadora mostrará “por qué 1984 no será como ‘1984’”. ”
El comercial más esperado de este año puede ser el de M&M’s, que hace unas semanas comenzó a caminar de puntillas hacia las guerras culturales estadounidenses.
El 24 de enero, M&M’s, que es propiedad de Mars, anunció que congelaría una campaña publicitaria con mascotas de dibujos animados de los dulces de colores después de que los conservadores estadounidenses criticaran la campaña como “despertada” debido a cambios de estilo, como la introducción de un púrpura carácter, un color asociado a la comunidad LGBTQ.
M&M’s anunció una “pausa indefinida” de los “spokescandies” y dio a conocer a un nuevo embajador de la marca, la popular comediante Maya Rudolph, en un cambio que estaba en el momento perfecto para captar la atención del público antes de un llamativo anuncio del Super Bowl.
Andrew Frank, analista de Gartner, no espera anuncios políticamente controvertidos este año y predice que las marcas navegarán con cuidado en un país dividido donde los mensajes estridentes pueden resultar contraproducentes.
“El antídoto contra la reacción violenta es el humor, mantenerlo ligero”, dijo Frank. “Creo que les gustaría reducir toda la toxicidad en torno a las guerras culturales y cosas así”.
Fiesta de cerveza
El juego del año pasado presentó varios lugares destacados en el mercado emergente de criptomonedas, liderado por el entonces titán FTX y su fundador Samuel Bankman-Fried.
La caída de FTX y Bankman-Fried ha creado “un momento apropiado para que hagan una pausa”, dijo Frank.
Para contrarrestar esa pérdida de publicidad, la emisora Fox puede contar con los ingresos de una gama más amplia de empresas cerveceras luego de la expiración de un acuerdo de exclusividad de larga data con Anheuser-Busch, el propietario de la marca Budweiser.
Frank espera que la mayoría de los anuncios busquen “gastos de ocio con mensajes alegres de entretenimiento escapista”, dijo.
El objetivo es “impartir la sensación de que todo está bien y que no necesita ser tan frugal con sus gastos discrecionales”.
Con información de: 24 Horas Nacional
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