La ciberseguridad se consolidó como una prioridad estratégica para las empresas ante el incremento de los ataques digitales, las amenazas de pérdida de datos y el riesgo de daño reputacional, afirmó Néstor Contreras Miranda, especialista de la Universidad Politécnica de Yucatán (UPY). El experto ofreció una conferencia magistral dirigida al sector empresarial durante la Semana de la Economía Digital 2025, organizada por la Secretaría de Economía y Trabajo (SETY).
Frente a empresarias, empresarios y emprendedores de diversos sectores, el especialista explicó los principales desafíos que enfrentan las organizaciones en el entorno global actual. Destacó la importancia de adoptar medidas preventivas para proteger la información y los procesos operativos, aspectos esenciales en un contexto de digitalización acelerada.
Yucatán impulsa la resiliencia digital empresarial
La conferencia se realizó como parte de las acciones que promueve el Gobierno del Estado, encabezado por Joaquín Díaz Mena, para vincular al sector productivo con el talento tecnológico local. Estas iniciativas fortalecen el objetivo de consolidar a Yucatán como uno de los estados más ciberseguros de México y fomentar la colaboración entre academia e industria.
Durante su intervención, Contreras Miranda explicó que la ciberseguridad ha evolucionado de ser una medida técnica a convertirse en un elemento central de la infraestructura moderna empresarial. Añadió que implementarla de forma robusta protege los activos de información, garantiza la continuidad del negocio y reduce el impacto económico de ataques o filtraciones.
Riesgos, vulnerabilidades y gestión de la información
El especialista presentó un panorama global sobre el aumento de los incidentes cibernéticos, destacando la sofisticación creciente de la delincuencia digital. También resaltó que, más allá de las herramientas tecnológicas, el factor humano sigue siendo el punto más vulnerable. Por ello, recomendó a las empresas invertir en capacitación constante, desarrollar procesos de concienciación del personal y fomentar buenas prácticas en el uso de contraseñas y manejo de información sensible.
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Además, instó a las organizaciones a mantener políticas de seguridad actualizadas, manuales de respuesta a incidentes bien definidos y un mantenimiento preventivo de sus sistemas. Según fue planteado, la ciberseguridad no debe asumirse como una reacción a los ataques, sino como una estrategia de negocio permanente para proteger la confianza, la reputación y la continuidad operativa de las empresas.
Las y los asistentes coincidieron en que invertir en ciberseguridad favorece un crecimiento empresarial resistente y sostenible dentro de la economía digital de Yucatán y del mundo.