La Corona de Adviento es una tradición cristiana que simboliza la preparación espiritual para la Navidad. Con origen en Europa del siglo XVI, continúa siendo una práctica esencial en los hogares católicos.
Significado de las velas de Adviento
La corona incluye cuatro velas principales, cada una con un simbolismo especial:
Velas moradas
Representan penitencia, arrepentimiento y preparación espiritual. Invitan a la reflexión antes del nacimiento de Jesús.
Vela rosa
Simboliza la alegría y la esperanza. Conmemora el gozo por la cercanía de la Navidad.
Vela blanca
Colocada al centro, representa la pureza, la luz y la verdad que Jesús trae al mundo. Se enciende el día de Navidad.
Orden de encendido de las velas
Cada domingo previo a Navidad se encienden las velas en este orden:
- Primer domingo: primera vela morada.
- Segundo domingo: dos velas moradas.
- Tercer domingo: la vela rosa (“domingo de alegría”).
- Cuarto domingo: tres velas moradas.
- Navidad: la vela blanca central.
Este ritual se acompaña de oraciones que fortalecen la espiritualidad familiar.
Una tradición de fe y esperanza
Muchas familias llevan sus Coronas de Adviento a la iglesia para ser bendecidas, iniciando así un ciclo de oración y unión comunitaria durante la temporada.