La presidenta Claudia Sheinbaum celebró que Alejandro Gertz Manero será embajador tras dejar la FGR, un movimiento que marca el fin de su gestión de casi siete años al frente de la institución y el inicio de una nueva etapa en su carrera dentro del servicio público.
Este viernes, la titular del Ejecutivo fue cuestionada sobre el proceso de retiro de Gertz Manero de la Fiscalía General de la República (FGR), a lo que respondió que ella le ofreció la representación diplomática al octogenario funcionario federal, lo cual él aceptó.
“Le ofrecí una embajada al Fiscal, la aceptó y tiene siete años en la Fiscalía, está por cumplir siete años y aceptó. Será embajador de México y qué bueno”, comentó Sheinbaum Pardo durante su conferencia matutina.
A su vez, subrayó que respeta al exfiscal, a quien le ofreció su reconocimiento, pero enfatizó que “ahora se entrará a una nueva etapa”, en la cual confía que haya mayor coordinación institucional.
De igual manera, la Jefa del Ejecutivo indicó que en breve se informará cuál será el destino del funcionario, debido a que el proceso requiere que el país receptor otorgue el beneplácito diplomático antes de hacer el anuncio oficial.
Por otro lado, confirmó que Gertz Manero, previo a su salida, nombró a Ernestina Godoy como titular de la Fiscalía Especializada de Control Competencial, cargo que asumió desde ayer, lo que le permite tomar posesión hoy mismo como encargada de despacho de la FGR.
Gertz se "retira" de la FGR rumbo a una misión diplomática
Ayer, Alejandro Gertz Manero envió al Senado una carta en la que informó que la presidenta Claudia Sheinbaum le ofreció una embajada “en un país amigo” y, por ende, se retiraba de la FGR.
En el texto que arribó a la Cámara Alta entre las 4 y las 6 de la tarde, se oficializó la salida del funcionario transexenal, lo que generó diversas reacciones entre legisladores de Morena, PAN y otras fuerzas políticas.
“Hago de su conocimiento que la Titular del Poder Ejecutivo Federal, Doctora Claudia Sheinbaum Pardo, me ha propuesto como Embajador de México ante un país amigo, lo cual se está tramitando en este momento. Dicha propuesta me va a permitir la posibilidad de continuar sirviendo a mi país, en una nueva tarea que me honra y que agradezco; ratificando así mi vocación de servicio público de tan larga trayectoria; razón por la cual, a partir de esta fecha y conforme a los trámites que correspondan, me estoy retirando de mi actual cargo como Fiscal General de la República”, se lee en el documento.
En el texto, solicitó “respetuosamente” a la presidenta del Senado, Laura Itzel Castillo, informar al Pleno para que “se dé inicio al proceso para la ratificación de mi nombramiento, con base en lo dispuesto en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes en la materia”.
Dicha salida fue aprobada por el Senado tras una sesión de casi 8 horas, tiempo en el que se especularon las razones del retiro y en el que se confirmó que Gertz Manero dejó como encargada de despacho a Ernestina Godoy, quien hasta hace poco fungía como consejera jurídica de la Presidencia.
El oficio que selló el relevo en la Fiscalía
En un oficio, Gertz Manero se asume como el conducto por el cual la presidenta Claudia Sheinbaum comunica a su funcionaria el nombramiento clave: “con la designación referida, se le confieren las facultades inherentes al cargo y responsabilidades que se precisan en el instrumento correspondiente”.
El documento, que cuenta con su firma autógrafa, membrete y fecha de expedición del 27 de noviembre, se divulgó mientras el Pleno del Senado discutía la carta en la que, en palabras de la priista Claudia Anaya, el fiscal no anunciaba su renuncia formal al cargo, sino que se despedía y presumía su próximo encargo como embajador.
El oficio que circuló en redes sociales —ante la falta de información oficial inmediata por parte de la FGR— fue mostrado y discutido por los senadores Adán Augusto López, Ignacio Mier y Clemente Castañeda durante el debate legislativo.
Finalmente, la salida de Gertz Manero fue considerada como “causa grave” y el Pleno la aprobó con 77 votos a favor y 22 en contra, allanando el camino para la reestructuración de la Fiscalía en este inicio de sexenio.

