La ATY y el Gobierno estatal impulsarán una reestructuración integral del sistema de transporte público, un modelo heredado con serias deficiencias de planeación, operación y sostenibilidad financiera que representan un desafío importante para Yucatán, indicó el gobernador Joaquín Díaz Mena

El sistema de transporte público fue heredado con deficiencias financieras y de planeación operativa que hoy están repercutiendo en el servicio a los ciudadanos. No vamos a maquillar el problema. Venimos a enfrentarlo y a buscar soluciones reales”, afirmó el mandatario durante su mensaje.

Actualmente, el Gobierno del Estado enfrenta una presión presupuestal sin precedentes, pues al cierre de septiembre ya se han destinado más de mil 100 millones de pesos en subsidios al transporte, cifra superior a lo aprobado por el Congreso para todo el año, que fue de 843 millones.

No hay forma de sostener esto con el sistema actual, por lo que se requiere un modelo eficiente y sostenible.

Reestructuración y modernización

El modelo será replanteado en los ámbitos financiero, operativo y jurídico, incorporando tecnologías eficientes, reorganización de rutas y fortalecimiento de la flota de autobuses modernos. El gobernador aclaró que no se trata de desaparecer el sistema Va y Ven, sino de hacerlo viable en el tiempo.

Lo que no puede continuar es un sistema corrupto que se hizo solamente para hacer negocios en favor de privados. Muy pronto veremos un sistema renovado, fortalecido y sostenible”, puntualizó Díaz Mena.

Por su parte, Jacinto Sosa Novelo, titular de la Agencia de Transporte de Yucatán (ATY), coincidió en que el sistema nació con errores de origen al carecer de planificación técnica adecuada y de una fuente clara de financiamiento que garantizara su permanencia.

El sistema cuesta 2 mil 600 millones de pesos al año y la tarifa apenas resuelve el 25 por ciento. Nosotros heredamos un déficit de 350 millones de pesos, pero tenemos la confianza y la fe de que lo vamos a resolver”, aseguró.

Planes y prioridad ciudadana

El proceso de reestructuración incluirá regeneración de rutas, estabilización financiera y consolidación del proceso de modernización. La prioridad será garantizar el derecho a la movilidad de los ciudadanos, con planes alternos en caso de que los concesionarios no puedan sostener el servicio.

Un transporte público deficiente no se resuelve de la noche a la mañana, pero con el esfuerzo de autoridades, concesionarios, empresarios y usuarios lograremos un sistema digno y eficiente para Yucatán”, concluyó el gobernador Díaz Mena.