La antigua ciudad de los Itzáes recibió a Kukulcán ante la emoción de más de 6,471 visitantes, principalmente nacionales, quienes esperaron con expectación el descenso de la serpiente emplumada en El Castillo.

Una breve tregua en la llovizna vespertina permitió que, a las 16:51 horas, la sombra de Kukulcán se proyectara sobre la pirámide, augurando tiempos de buena siembra, según el calendario maya.

Cultura y turismo

El Patronato de las Unidades de Servicios Culturales y Turísticos del Estado de Yucatán (Cultur), junto con el personal de la zona arqueológica, implementó un operativo especial para garantizar el acceso seguro durante la jornada. La asistencia superó en 3,032 personas la registrada el año anterior.

Clemente Escalante Alcocer, director general de Cultur, y Guadalupe Espinosa Rodríguez, titular de la Zona Arqueológica y Gran Museo de Chichén Itzá, recorrieron el parador turístico y destacaron la participación del público nacional, que acudió desde temprano para presenciar este fenómeno maya.

Gran Museo de Chichén Itzá

Durante la jornada, el subdirector del Gran Museo de Chichén Itzá, Miguel Ángel Buenrostro Alba; el subdirector de Difusión, Gerónimo Can Tec; y el custodio Gaspar Burgos Fuentes compartieron información sobre el equinoccio, resaltando que es testimonio del conocimiento astronómico avanzado de la civilización maya.

Pese al pronóstico de nubosidad y lluvia, Kukulcán descendió sobre El Castillo y cada escalón iluminado desató aplausos, mientras la alfarda norte quedó bañada por el sol. Al concluir el fenómeno, la lluvia regresó, como si confirmara la promesa de un dios maya que volverá en primavera