Con más de tres décadas de trayectoria en la industria del doblaje, Uraz Huerta, voz de Inosuke Hashibira en Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba, visitó la capital yucateca como invitado especial de la Tsunami 2025, donde compartió con los asistentes no solo anécdotas de su carrera, sino también su visión sobre lo que significa darle voz a personajes que marcan generaciones.

A sus 38 años, Huerta acumula 33 de experiencia en cabina. “Yo no lo llamo trabajo porque es lo que hago a diario”, sentenció en entrevista con 24 HORAS Yucatán.

Lo que hace especial cada proyecto no es grabarlo, sino ver cómo la gente reacciona, cómo se identifica con los personajes. Eso es lo que lo transforma en algo único”, añadió.

‘Para mí no es un trabajo’; Uraz Huerta comparte su pasión por el doblaje en Mérida

Inicios en el doblaje

El intérprete recordó sus inicios en la industria de una forma casi accidental: “una vez me olvidaron en el kínder y me llevaron al estudio donde trabajaban mis papás. Desde entonces empecé a meterme en esto y ya nunca salí”.

Aunque proviene de una familia vinculada al medio, fue él el único que eligió el camino artístico: “mi papá trabajaba en lo operativo y mi mamá en lo administrativo, pero yo decidí ser actor”.

Voces icónicas del anime

Su carrera ha estado marcada por títulos icónicos del anime. Ha prestado su voz a personajes de Dragon Ball Z, Digimon Adventure, Sakura Card Captor y, en años recientes, a uno de los favoritos de Demon Slayer, el explosivo Inosuke.

Nosotros empezamos a agarrarle cariño desde la primera temporada porque vimos la reacción del público. Llegó un momento en que estábamos en un pueblito de Suiza y nos reconocieron. Ahí entendí que esto ya era un fenómeno mundial”, dijo.

‘Para mí no es un trabajo’; Uraz Huerta comparte su pasión por el doblaje en Mérida

Maestro de nuevas generaciones

Además de actor, Huerta es maestro de doblaje en la escuela Histrionem Studio, donde comparte su experiencia con nuevas generaciones. Reconoció que el camino no es sencillo, especialmente para quienes se acercan al doblaje sin formación previa:

Primero hay que ser actor. Si alguien quiere dedicarse a esto, tiene que estudiar teatro, locución, y después especializarse en doblaje. A los adultos les cuesta más porque llegan con miedos y complejos. A veces hasta necesitan terapia para romper esas barreras”, precisó.

Encuentro con fans en Mérida

En Mérida, Huerta se encontró con un público entusiasta, pero también admitió que el doblaje como disciplina aún tiene un camino por recorrer en la región: “aquí más bien me encuentro con fans. Solo he tenido un par de alumnos de Yucatán en mis clases en línea, pero me encantaría que más jóvenes se animen a prepararse. Como cualquier profesión, requiere disciplina y respeto”.

Un consejo para futuros actores de doblaje

El actor también ofreció un consejo a quienes sueñan con seguir sus pasos: “se necesitan 10 mil horas para ser maestros en algo. Si quieren dedicarse al doblaje, empiecen a acumular esas horas ya. Lo importante es tener cariño, dedicación y respeto por lo que haces”.