Los primeros 90 minutos de la final del Clausura 2025 dejaron un primer encuentro entre América y Toluca sin grandes emociones en el estadio Ciudad de los Deportes, en donde se disputó el encuentro en la capital mexicana.
Limitados por el juego táctico y prioridad que hubo por mantener sus porterías imbatidas en una serie a 180 minutos, América y Toluca igualaron sin goles, para dejar al Nemesio Diez como escenario en donde se definirá el domingo al campeón de LigaMX, sin ningún tipo de ventaja deportiva.
América con dominio el primer tiempo
Con acciones polémicas en área de Toluca, con potenciales faltas que ni Daniel Quintero como juez central, ni sus asistentes en el videoarbitraje convalidaron, el primer tiempo tuvo un mayor dominio de América con el esférico, aunque sin contestar acciones de gol directo ante el arco defendido por Luis García.
Limitados a un estilo reactivo y sin el peso específico de su hombre gol Paulinho, ausente por un molestia física en este primer partido final, Toluca logró concretar en un contragolpe la jugada más clara de la primera parte, con un remate de Robert Morales que Luis Ángel Malagón contuvo correctamente en la portería local, para dejar la paridad sin goles tras los 45’ jugados en Ciudad de México.
Un segundo tiempo irregular por ambos bandos
Sin grandes ajustes para la parte complementaria y con dos equipos que no buscaron con tanto ahínco el área rival, la segunda parte en el estadio Ciudad de los Deportes, sufrió más lapsos de irregularidad, ante el conformismo de Toluca y la poca creatividad de América como equipo obligado a buscar una diferencia ante su gente.
Con apenas un remate a portería, pero un remate de volea de Rodrigo Aguirre en la parte final del juego, América apenas logró incomodar a la zaga de Toluca, que incluso con su propuesta limitada en ofensiva, el cuadro de Antonio Mohamed logró hilvanar hasta ocho remates totales y tres que forzaron a Malagón a evitar la caída de su arco.
El partido concluyó con una afición americanista en clara decepción, después de 90 minutos en los que su equipo no fue capaz de superar a un rival al que en fase regular le había anotado tres goles y sin hacer pesar su condición de tricampeón mexicano.