Marce, la recicladora que da voz a los recicladores de Colombia

Sara Samaniego, más conocida como "Marce, la recicladora", recorre montañas de basura para mostrar, a través de las redes sociales, la vida de los recicladores en la capital colombiana.

Con celular y micrófono en mano, Marce entrevista a quienes clasifican toneladas de cartón y plástico en un almacén de Bogotá, mientras sus videos llegan a miles de personas.

Una influencer que transforma el reciclaje en contenido viral

Con su overol azul, cabello trenzado y gorra hacia atrás, Marce se ha convertido en una figura clave de la educación ambiental en Colombia. Frente a un anillo de luz y su teléfono, crea contenido al ritmo de Shakira o Karol G, logrando una conexión directa con su audiencia.

"¡Hola, reciclamores!", es su frase insignia con la que saluda a su creciente comunidad en Instagram, TikTok y YouTube. Además de entretener, su misión es clara: dar visibilidad a la dura realidad de los recicladores, quienes dependen de la venta diaria de desechos recolectados en las calles de Bogotá.

Recicladores: actores invisibles del medioambiente

Bogotá, una ciudad de 8 millones de habitantes, no cuenta con un servicio público de recolección selectiva de desechos. Por ello, cerca de 26.000 recicladores informales realizan esta tarea esencial. "A menudo son ignorados y maltratados", comenta Samaniego.

Colombia es uno de los países de Latinoamérica con mayor informalidad laboral, alcanzando un 55%, y alberga alrededor de 74.300 recicladores. A nivel mundial, se estima que entre 20 y 34 millones de personas realizan esta labor, fundamental para el cuidado del planeta, ya que contribuyen a reducir emisiones de CO2, mitigar el calentamiento global y conservar recursos naturales.

Respondiendo dudas ambientales en redes

Desde su canal, Marce la recicladora también educa sobre consumo responsable y reciclaje. "Miles de preguntas me llegan día a día", afirma, mientras resuelve inquietudes comunes como qué se debe tirar en el contenedor de reciclaje o si las toallitas húmedas son perjudiciales para el medioambiente.

Además, combate el estigma que enfrentan estos trabajadores: "Son maestros e inspiración", asegura. En la calle, los recicladores empujan pesadas carretillas de madera en busca de materiales aprovechables, que luego venden en centros de acopio.

El día a día de los recicladores en Bogotá

Mary Luz Torres, recicladora con 28 años de experiencia, empuja su carrito de madera durante horas, atravesando la ciudad. "Nosotros somos seres humanos, no somos unos animales", reclama mientras sostiene que sin este trabajo no tendría cómo alimentar a su familia.

A pesar de las dificultades, muchos recicladores siguen adelante. Pedro Talero, de 52 años, inicia su jornada al mediodía y la concluye por la noche debajo de un puente, donde descansa junto a su carretilla. Su meta diaria: "Ganar entre 80.000 y 90.000 pesos", el equivalente a unos 20 dólares.

Fotos y texto: AFP

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