El aroma a masa, a hojas de maíz y a guisos humeantes comienza a inundar los hogares yucatecos. Se acerca el 2 de febrero, Día de la Candelaria, una fecha que marca el fin del ciclo navideño y que, como dicta la tradición, trae consigo una deliciosa costumbre: compartir tamales ya sea con la familia o con los amigos.
En el mercado Lucas de Gálvez y San Benito algunas familias yucatecas ya se preparan para la elaboración del tradicional platillo, el cual es más barato elaborarlo en casa que comprar por unidad, según pudo revisar el equipo de 24 HORAS Yucatán.
Esta celebración, que tiene raíces tanto religiosas como prehispánicas, se entrelaza con la partida de rosca de Reyes. Aquellos afortunados -o no tanto, según se vea- que encontraron al Niño Dios escondido en el pan, se convierten en los anfitriones de la tamalada, cumpliendo así con el compromiso adquirido el 6 de enero.
Los mercados más grandes de la entidad ya se preparan y ofrecen todo lo necesario para abastecer a las familias que buscarán los ingredientes, para preparar en casa los tamales, ya que han advertido que representa un ahorro significativo.
Las recetas para la elaboración del tradicional platillo son varias, así como variado es el abanico de posibilidades para elaborar tamales, no obstante, en Mérida, lo más común para esas fechas es el llamado vaporcito, un pequeño tamal, envuelto en hoja de plátano, el cual puede ser relleno ya sea de pollo o de carne molida.
Tamales caseros: una opción más económica
Martha Mex Ku, vecina del barrio de Chuburná compartió que pensando en estas fechas ella utiliza para preparar uno 30 vaporcitos, los siguientes ingredientes: masa, pollo, tomate, manteca, dos paquete de hoja de plátano, recado rojo, una cabeza de ajo, pimienta, epazote, cebolla morada. Pensando en la cantidad de cada uno de estos ingredientes, por la mencionada cantidad, las personas llegarán a gastar unos 360 pesos.
Eso sí, efectivamente se traduce en un ahorro ya que, en distintas partes de esta colonia, cada uno de estos tamales se puede a conseguir en un promedio de 18 pesos, -depende del tamaño y el lugar en donde se compre- por lo que, si se piensa en 30 tamales el total sería de 540 pesos, 180 más que si se elabora en casa.
Precios de los ingredientes en los mercados
Lo más costoso es el precio del pollo fresco, el cual está 55 pesos el kilo, existen otras opciones más baratas como gallina o pollo, pero congelado, la hoja de plátano está a 25 el paquete, el tomate se pude conseguir hasta en los 6 peso, 10 pesos el paquete con 5 naranjas agrias que es la temporada, 22 pesos el litro de manteca de cerdo, 20 el kilo de masa para elaborar el kóol.
Cabe mencionar que estos son precios de los mercados Lucas de Gálvez y San Benito, estos pueden variar en las colonias que cuentan con su propia central de abasto, por lo general en más caro, por lo que las personas aprovechan para acudir al centro.

Anticipación para evitar aumentos de precio
Para Silvia Delgado es un buen momento para ir comprando lo necesario para hacer los tamales, ya que en su familia en tradición encontrarse en su casa, independientemente quienes les haya tocado dar los tamales, dijo que para este le tocó a ella y a dos de sus hermanos.
“Vengo con tiempo para comprar cosas como los tomates, la manteca, la cebolla, la naranja, el recado rojo, el sábado vendré al mercado por hoja de plátano, el pollo, la masa que es lo que tiene que estar fresco”, indicó.
Esteban Carrillo jefe de familia y vecino de la colonia centro prefiere comprar con tiempo en vez de espera a la última hora, dijo que luego pueden subir los precios repentinamente y gastar un poco más de lo planeado.
“Nos toca dar los tamales para la Candelaria, aprovecho desde ahora venir al centro y comprar lo necesario, el pollo, masa y demás cosas que se puedan echar a perder pronto, lo compraré en la colonia, aunque pague un poco más”, apuntó.
El significado de la Candelaria y la tamalada
El Día de la Candelaria es mucho más que una simple comida. Es un símbolo de unión familiar, de tradición y de la rica gastronomía mexicana. Es un día para compartir, para celebrar y para disfrutar del sabor inigualable de un buen tamal caliente, y con la receta de cada familia.