Foto: Michelle de los Ángeles

Una Navidad sin nochebuena no es Navidad, esta flor 100% mexicana se ha convertido en un símbolo de las fiestas decembrinas en nuestro país y en otros lugares el mundo, pero su origen se remonta a la época prehispánica.

De acuerdo con una investigación realizada por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en la época prehispánica, la flor de nochebuena era conocida como “flor que se marchita” (Cuetlaxóchitl en náhuatl); se utilizaba con fines ceremoniales para adornar los altares de la Diosa Tonantzin, como trofeo era entregada a los guerreros al regresar de una batalla e incluso medicinal pues consideraban que el líquido blanco que brota de su tallo incrementaba la producción de leche materna.

Tipos de flor de nochebuena

El nombre científico de la flor de Nochebuena es Euphorbia pulcherrima y es cultivada por toda la costa del pacífico, desde Sinaloa hasta Guatemala, clasificándose entre silvestres y cultivadas.

Las nochebuenas silvestres crecen en bosques y selvas cercanas a ríos y barrancas con sombra; mientras que las de cultivo, más utilizadas para la venta y como plantas de ornato, crecen en invernaderos y tienen algunas características que las diferencian, también dependiendo de la lejanía del lugar de donde son endémicas

Existen variaciones entre las nochebuenas silvestres y las de cultivo; las primeras son muy delgadas y forman un solo juego de hojas alrededor de las inflorescencias; mientras que las de invernadero son de mayor volumen y mucho más vistosas

Su color es otra de las variantes que puede presentar esta flor y va desde el rojo intenso y rosa hasta amarilla, blanca, marmoleada y rayada; sin embargo, todas pertenecen a la misma especie.

¿Cómo comenzó a utilizarse la nochebuena en Navidad?

La historia de la relación de la flor de nochebuena con la Navidad se remonta a la época de la conquista, cuando los monjes franciscanos que habitaban en la ciudad de Taxco comenzaron a integrarla en sus actividades de evangelización.

Los monjes franciscanos colocaban las flores de nochebuena como adorno en los nacimientos en su afán por incluir simbolismos prehispánicos en los de la religión impuesta en la Nueva España. Esta práctica se extendió en otras regiones hasta convertirse en un simbolismo de la temporada, pero sobre todo de Navidad.

¿Cómo salió de México la nochebuena para convertirse en símbolo mundial?

Joel Robert Poinsset, un político, militar, naturalista y embajador de Estados Unidos en México, recolectó diversidad de animales y plantas, entre ellas la flor de nochebuena proveniente de Taxco, misma que introdujo a la floricultura mundial enviando el ejemplar al Jardín Botánico de Bartram, en Filadelfia.

En 1829 fue presentada en un festival de plantas y frutos de Bertram y desde ese momento comenzó a ser cultivada del otro lado de la frontera y utilizada para adornar las festividades.

A Europa llegó tiempo después, cuando el curador Robert Buist la cultivó en el Real Jardín Botánico de Edimburgo. 

El uso de la nochebuena como símbolo de la Navidad se ha extendido prácticamente a todo el mundo, incluso se ha instituido un día para celebrar su significativa existencia. Cada 8 de diciembre se celebra el Día Nacional de la Nochebuena y en Taxco de donde es originaria, se coloca una flor monumental adornada con miles de esta también conocida como Flor de la Paz.

Fotos: Cuartoscuro

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