En la Facultad de Derecho, de la Universidad Autónomas de Yucatán (Uady), puedes ser consejero alumno y un agresor. Así lo revelan los recientes hechos y testimonios de alumnos.
Ante este situación, líderesas estudiantiles exigen a las autoridades universidades implementar acciones para erradicar la violencia de género; como aplicar una Ley 3 de 3 y así evitar que personas agresoras ocupen cargos importantes dentro de la institución-.
El nuevo consejero alumno de la Facultad de Derecho UADY no sólo fue acusado de corrupción en su campaña, sino que tiene denuncias por agresión contra la mujer.
¿Cuál es el problema?
Sin embargo, en la Uady no hay ningún problema porque en las convocatorias para representar al alumnado no hay nada que te impida ser consejero alumno, aunque tengas denuncias, así lo reveló Alejandra González, estudiante dela Facultad de Derecho y directora de la colectiva feminista Girl Up (Resistencia Feminista), conformada por estudiantes mujeres de la casa de estudios y egresadas.
Historial
Estudiantes del plantel señalan que el candidato electo como consejero estudiantil ha sido relacionado con diversas denuncias públicas no oficiales, recopiladas en diferentes años (2022-2024) a través de tendederos de denuncia en el contexto del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo.
Alejandra González menciona que desde antes ya lo identificaban por las denuncias en tendederos los 8 de marzo.
“Muchas compañeras y yo nos preocupábamos por el hecho de que él fuera a ser candidato porque ha salido muchas veces en los tendederos de la facultad, incluso desde antes de entrar a la misma universidad”, mencionó.
González también señala que se conoce el historial del alumno y que, personalmente, le ha tocado escuchar testimonios de sus compañeras.
“Dentro de la misma comunidad universitaria sabemos de su historial e, inclusive, nos ha tocado escuchar testimonios entre las compañeras”, afirmó Alejandra.
No existe regulación
Actualmente, en México existe la iniciativa “3 de 3 contra la violencia”, que busca garantizar que quienes aspiran a cargos públicos no tengan antecedentes de violencia de género.
Consiste en tres requisitos: no ser deudor de pensión alimenticia, no haber sido sentenciado por violencia familiar o doméstica, y no haber cometido delitos de índole sexual. Esta medida promueve la transparencia y la integridad en la administración pública, protegiendo derechos fundamentales.
Alejandra González menciona que, para ella, la UADY debería implementar esta iniciativa para las personas que deseen un puesto de representación en la institución, ya que las convocatorias no contemplan nada de esto.
“Para mí, regular estas situaciones podría empezar con un requisito, algo como la ‘3 de 3’, ya que la convocatoria no tiene nada de eso, es muy general, lo que permite que personas como el compañero se postulen y obtengan un cargo de representación”, mencionó.
Es un hecho: ¿Qué prosigue?
El pasado 21 de noviembre, la página de la Facultad de Derecho UADY hizo una publicación felicitando al ahora consejero alumno, D.V. La publicación, que al día de hoy tiene 72 comentarios, refleja principalmente la indignación de alumnas por el hecho de que un alumno con denuncias por agresión sea su actual representante.
– “¿Cómo nos vamos a sentir seguras si ese es nuestro consejero alumno?”
“Un agresor no me representa.”-
“No fue para nada una jornada ejemplar. A muchas no nos representa.”
Se lee en los comentarios.
El alumno ya ganó, y es un hecho que será el representante de cientos de alumnas que, lejos de sentirse seguras o confiadas en que puede hablar en su representación, experimentan lo contrario. Alumnas están a la espera de que, con sus manifestaciones, la institución tome medidas.
“El anhelo de poder hacer algo ahí está y siento que, dentro de los mismos universitarios, no sabemos qué más hacer. ¿Qué sigue? ¿Qué podemos hacer? O sea, ya ganó”
mencionó Alejandra González.