Albania, una vez considerada uno de los países más cerrados del mundo, se ha convertido en un atractivo destino para el turismo estético.
Este fenómeno, que incluye tratamientos dentales y procedimientos estéticos, atrae a millones de visitantes en busca de mejorar su imagen.
Tratamientos de Alta Calidad a Precios Competitivos
Los servicios ofrecidos en clínicas albanesas, como la clínica Gremi en Tirana, se caracterizan por su calidad. Dritan Gremi, jefe de la clínica, enfatiza que “ofrecemos cuidados de alta calidad con un material garantizado y certificado”.
La competitividad de los precios, que pueden ser significativamente menores que en otros países europeos, atrae a pacientes de diversas nacionalidades.
Por ejemplo, Stéphane Pealat, un paciente francés, compara el coste de un tratamiento dental en Albania con el de su país.
En Francia, el tratamiento le costaba 50.000 euros, mientras que en Albania solo pagó 13.500 euros. Esta diferencia considerable muestra el atractivo de Albania como un destino de turismo de felicidad.
Crecimiento del Sector de Turismo Médico
Con un sector estimado entre 200 y 250 millones de euros anuales, Albania se posiciona como un competidor fuerte en el mercado del turismo médico. Las clínicas aprovechan los bajos costes de gestión y la fiscalidad atractiva para ofrecer precios competitivos. Anna Maria, una italiana que visitó Albania, combina su tratamiento dental con una cirugía estética, demostrando cómo este fenómeno se expande más allá de los cuidados dentales.
AFP