En lo que posiblemente fue su última visita a Yucatán como presidente de México, Andrés Manuel López Obrador fue recibido con aplausos y gritos de apoyo por más de 200 personas en la estación Teya del Tren Maya, ubicada en las afueras de Mérida.
Tras una intensa jornada que incluyó un recorrido por la zona arqueológica de Chichén Itzá, el mandatario arribó a la estación pasadas las 20 horas, donde lo esperaban simpatizantes con vítores de “¡presidente, presidente!”.
El ambiente era de júbilo y gratitud. López Obrador, quien se encuentra a solo 10 días de concluir su sexenio, dedicó tiempo a saludar personalmente a quienes se dieron cita para despedirlo.
Con su característico estilo cercano, el presidente recibió obsequios, firmó autógrafos y estampó su firma en varios ejemplares de su libro ¡Gracias!, un gesto que muchos de sus seguidores valoraron como un recuerdo significativo de su mandato.
La estación del Tren Maya, uno de los proyectos insignia de la administración de López Obrador, fue escenario de un despliegue de apoyo popular. El mandatario mantuvo su habitual sencillez mientras estrechaba manos y escuchaba palabras de aliento de sus simpatizantes.
El presidente no estuvo solo durante esta visita. Lo acompañaba Claudia Sheinbaum Pardo, próxima presidenta de México y considerada la sucesora natural de López Obrador en el movimiento de la Cuarta Transformación.
También formaron parte de la comitiva el gobernador electo de Yucatán, Joaquín Díaz Mena, el diputado y gobernador con licencia de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, así como las gobernadoras de Campeche, Layda Sansores Sanromán, y de Quintana Roo, Mara Lezama Espinosa.
Pasadas las 20:30 horas, el presidente abordó su camioneta Suburban y se dirigió a su hotel para concluir la jornada.
Este último encuentro con los yucatecos marca el cierre de una serie de visitas presidenciales que López Obrador ha realizado al estado a lo largo de su sexenio, siendo Yucatán uno de los estados que más ha visitado a fin de supervisar el Tren Maya.