La bandera de México ondea de nuevo desde ayer en el asta de la recién remodelada Plaza Grande de Mérida, tras una ceremonia que encabezó la encargada del Despacho del Gobernador, María Fritz Sierra, en funciones del titular del Poder Ejecutivo, junto con autoridades civiles y militares.
Como parte de las actividades con motivo de las fiestas patrias y acompañada de la alcaldesa de Mérida, Cecilia Patrón Laviada y los comandantes de la 13 Zona Naval, José Ramón López Luna y de la 32 Zona Militar, Jorge Enrique Martínez Medina, Fritz Sierra atestiguó el izamiento del lábaro patrio monumental de 17.5 metros de largo por 10 de ancho en el asta de 35 metros de altura instalada en el centro de la Plaza Grande.
Este espacio recién remodelado, fue testigo del izamiento de la enseña tricolor, que este día estuvo a asta, como parte de un acto para rememorar al batallón de irlandeses que se pasaron al Ejército mexicano durante la guerra entre México y Estados Unidos entre1846 y 1847.
En ese marco, la encargada del despacho del Gobernador del Estado, junto al titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Luis Felipe Saidén Ojeda; del fiscal General del estado, Juan Manuel León y el encargado de la Secretaría General de Gobierno, José Carlos Puerto Patrón entonó el Himno Nacional Mexicano, seguido del yucateco, símbolo de identidad y patrimonio cultural de nuestro estado.
La bandera de México ondea en la Plaza Grande de Mérida desde el 13 de agosto de 1913, una fecha clave en la historia de la ciudad.
Fue el entonces gobernador de Yucatán, José María Pino Suárez, quien implementó la colocación de la bandera nacional en este icónico espacio público.
La decisión de izar la bandera en la Plaza Grande respondió al deseo de fortalecer el sentido de identidad y pertenencia a la nación mexicana en una región que históricamente había mantenido una cierta distancia con respecto al centro del país, tanto por su ubicación geográfica como por los distintos movimientos sociales que la habían caracterizado.
Desde aquel año, el asta ubicada frente a la Catedral de San Ildefonso se ha convertido en un símbolo del respeto y la lealtad de los yucatecos a la nación mexicana.
Durante las Fiestas Patrias, este espacio cobra un significado especial, pues es el lugar donde se llevan a cabo ceremonias oficiales, como el tradicional Grito de Independencia el 15 de septiembre y el desfile cívico-militar del día siguiente.
En 1992, el gobierno del estado renovó el asta bandera y colocó una bandera monumental, con el fin de que su presencia en la Plaza Grande tuviera un mayor impacto visual y simbólico, reafirmando el compromiso de Mérida y Yucatán con los valores de la República Mexicana.
La bandera, en su posición central dentro de la plaza, sigue siendo un recordatorio constante del vínculo entre los ciudadanos y la nación, y su izamiento diario es un acto de respeto y orgullo nacional para todos los que transitan por el corazón de Mérida.