A ocho meses del inicio de su operación en Mérida y su zona conurbada, las unidades del Ie-Tram siguen llamando la atención en las calles de la capital yucateca. En un recorrido realizado por 24 HORAS Yucatán, se pudo constatar la eficiencia y tecnología de estos autobuses, cuya principal característica es ser amigables con el medioambiente.

En las inmediaciones del Gran Parque de la Plancha se encuentra una de las tres terminales del Ie-Tram, donde se ubican andenes que albergan los vehículos que parten con diferentes frecuencias hacia la estación del Tren Maya en la comisaría de Teya, la terminal de Umán y el paradero de la Facultad de Ingeniería de la UADY.

El recinto está equipado con pantallas que informan a los usuarios sobre las próximas salidas, así como una taquilla donde se pueden adquirir boletos para cualquiera de los tres destinos, y un cajero para recargar las tarjetas del Va y Ven, que también sirven para abordar el Ie-Tram.

La sala de espera, junto a los andenes, es espaciosa y cuenta con personal de la Agencia de Transporte de Yucatán (ATY), dispuesto a resolver cualquier duda sobre el servicio. En nuestro caso, aguardamos el autobús que se dirige a la Facultad de Ingeniería, el cual sale cada 15 o 20 minutos.

La llegada de la unidad alerta al personal, que informa a los usuarios que es momento de abordar. Uno a uno subimos al vehículo e inmediatamente pasamos la tarjeta por el sensor, que reacciona con rapidez y eficacia.

Una de las primeras características que llama la atención del Ie-Tram es la cabina del conductor, que está aislada, a diferencia de las unidades convencionales, permitiéndole concentrarse en la conducción. El cobro con tarjeta evita la necesidad de contacto con los pasajeros, por lo que el conductor solo debe estar pendiente del camino.

El interior del autobús es espacioso, con 30 asientos distribuidos a lo largo; algunos en sentido tradicional y otros “encontrados”, lo que brinda una sensación de amplitud. Los asientos son transparentes, ergonómicos, y están limpios y en buen estado, al igual que los pisos y las ventanas, que permiten una vista de 360 grados.

Una vez instalados, llama la atención una protuberancia negra en el lado izquierdo de los asientos: un conector USB que permite a los pasajeros cargar cualquier dispositivo que use este tipo de enchufe. Celulares, laptops, tabletas, baterías, en el Ie-Tram es posible recargar prácticamente cualquier artículo electrónico.

El vehículo se desplaza con sutileza por las calles y, al ser eléctrico, su ruido es nulo. La mayor parte del trayecto utiliza un carril exclusivo, lo que reduce considerablemente los tiempos de traslado. No obstante, debe respetar señalamientos como semáforos y altos, como cualquier otro vehículo.

Otra ventaja es que cada par de asientos cuenta con un timbre para avisar al conductor que se descenderá de la unidad, por lo que en la mayoría de los casos los usuarios no deben levantarse antes de llegar a su paradero. Para descender, pueden elegir la puerta más cercana, ya que el Ie-Tram cuenta con tres.

La ruta completa del Parque de la Plancha a la Facultad de Ingeniería de la UADY tiene una duración de dos horas. Desde la estación del Parque hasta la facultad, el autobús se demora 40 minutos; el tiempo excede los 80 minutos de regreso, ya que el trayecto transita sobre Paseo de Montejo y cruza el primer cuadro de la ciudad, con su respectivo tráfico.

Entrevistados por este rotativo, usuarios del Ie-Tram se mostraron sumamente satisfechos con el servicio, pues les permite llegar a sus centros escolares o de trabajo de forma cómoda y veloz. Antes, aseguran, podían demorar hasta dos horas realizando el mismo trayecto que hoy hacen en 40 minutos.

Jonathan Pérez, estudiante de la Facultad de Ingeniería, comentó que una de las áreas a mejorar tiene más que ver con la infraestructura que con el transporte en sí. Criticó que, al bajarse en el periférico, los estudiantes deban cruzarlo sin pasos peatonales o estrategias que les permitan hacerlo con seguridad.

A pesar de ese detalle, la mayoría de las personas que abordaron el Ie-Tram se mostraron satisfechas y agradecidas por el acceso a un transporte digno, de avanzada tecnología, y que les permite reducir sus tiempos de traslado. En el futuro, esperan que todas las unidades del estado operen bajo esta modalidad.

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