Un problema grave que vive el gremio artístico de Yucatán es el desinterés por la propiedad intelectual, especialmente para el registro de marca, derechos de autor y contrato laboral, consideró María Luisa Ríos García Bastarrachea, abogada especialista en marca y derechos de autor.
La litigante comentó que la propiedad intelectual es tan importante, pero pasa desapercibido muchas veces, ya que la mayoría de los artistas yucatecos no saben ni siquiera cuáles son sus derechos a proteger, lo que ha generado que a lo largo del tiempo se haya dado casos de robo de ideas, trabajo, entre otras situaciones.
Indicó que una persona puede registrar sus ideas y trabajo, como lo son coreografías, medios audiovisuales, cinematografía, fotografía y una amplia gama de opciones, ya que es extenso el universo del derecho de autor, además de que otro problema que se vive muy frecuentemente, es el tema del contrato laboral.
“Muy pocas personas del mundo artístico se preocupan por hacer un contrato, creo que el cinco por ciento del universo artístico de Yucatá hace contratos porque la gente solo apalabra las cosas, algo que ocurre mayormente en el mundo cinematográfico. A nivel local es un problema grave”, indicó la entrevistada.
Consideró que en Yucatán no se le da la importancia necesaria a la propiedad intelectual por desconocimiento, ya que es “normal” que cuando hay un emprendimiento o una producción de cine, no se comience con un contrato o con el registro de la marca u obra, aunado a que una figura que casi no se conoce es la de reserva de uso exclusivo.
“Una figura que casi no se conoce es la de reserva de uso exclusivo, que es cuando se registran los nombres artísticos del artista o el nombre de una banda o nombres de revistas, podcast, entre otros”, comentó Ríos García Bastarrachea, quien abundó que este trámite cuesta alrededor de cinco mil pesos, mientras que el registro de obra 300 pesos.
Para contrarrestar este problema, indicó que las escuelas deben procurar tener una materia enfocada en derechos de autor, para que las y los futuros artistas sepan cómo registrar sus ideas, aunado a que a nivel local pueden pedir asesoría a la Secretaría de la Cultura y las Artes y a nivel nacional con el Instituto Nacional del Derecho de Autor.
Agencia Quadratín