A consecuencia de sistemas anticiclónicos que se encuentran entre el Océano Atlántico y el Mar Caribe, se han mantenido las altas temperaturas en la región a la que pertenece Yucatán.
De hecho, este fenómeno atmosférico ya comienza a repercutir en la entidad con la presencia de sequía temprana, según lo informado por el Sistema Meteorológico Nacional, a través de su Monitor de Sequía.
Ante este panorama, el meteorólogo del Comité Institucional para la Atención de Fenómenos Meteorológicos Extremos (Ciafeme) de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), Juan Vázquez Montalvo, explicó que son estos sistemas anticiclónicos los que van impidiendo que los frentes fríos que lleguen a la entidad lo hagan con toda su intensidad y al mismo tiempo ha provocado que llueva menos de lo esperado, de ahí estos signos de sequía.
El experto señaló que incluso existen puntos del territorio yucateco donde no ha caído lluvia en estos días del presente mes de enero; en otras zonas, efectivamente, ha caído, pero muy poco, lo que, por consecuencia, ha contribuido a que el SMN y la Comisión Nacional del Agua hayan detectado una temporada “anormalmente seca”, según su último informe con fecha de corte al 31 de diciembre de 2023.
Las áreas en donde se está presentando esta falta de lluvia son sobre todo al noreste de Yucatán, particularmente en Tizimín y alrededores, donde también se ha identificado sequía de moderada a severa.
Vázquez Montalvo advirtió que también existen zonas del poniente de la entidad en donde también hay indicios de sequía, como en Hunucmá; esto podría incluso prolongarse hasta el próximo mes de mayo.
Explicó que para la entidad, no es normal que para principios de año se presenten estas condiciones, sino más bien se esperan hacia finales de febrero, concluyendo en mayo, que es cuando empiezan las lluvias.
Eso sí, destacó que incluso con estos indicadores, Yucatán no tendrá problemas con el abastecimiento de agua, ya que el acuífero de la entidad se encuentra a 1.60 metros, es decir, medio metro por encima de lo normal, esto a consecuencia de la cantidad de agua que dejaron los fenómenos meteorológicos de 2020.