Las Comisiones Unidas de Salud y de Estudios Legislativos Primera aprobaron el dictamen a la minuta que reforma, adiciona y deroga diversas disposiciones de la Ley General de Salud para fortalecer la atención médica de la población, al prohibir los cigarrillos electrónicos, vapeadores y otros dispositivos análogos, entre otros aspectos.
La minuta recibió trece votos a favor y siete en contra en la Comisión de Estudios Legislativos Primera, presidida por el senador Manuel Huerta Ladrón de Guevara, y diez votos a favor y tres en contra en la Comisión de Salud, encabezada por el senador José Manuel Cruz Castellanos, por lo que continuará su trámite legislativo correspondiente.
Entre las modificaciones se incorpora un capítulo específico sobre cigarrillos electrónicos, vapeadores y sistemas o dispositivos análogos, que los define como todo aparato o sistema mecánico o electrónico, de cualquier tecnología, que se utilice para calentar, vaporizar o atomizar sustancias tóxicas líquidas, geles, sales, ceras, aerosoles secos, resinas o aceites cerosos, con o sin nicotina, susceptibles de ser inhaladas por la persona consumidora.
Además, se plantean medidas de coordinación dentro del Sistema Nacional de Salud, cuya coordinación se mantiene a cargo de la Secretaría de Salud, responsable de planear e integrar la demanda de medicamentos, equipo médico de alta tecnología e insumos.
Prohibición de comercio y publicidad de vapeadores
El proyecto establece la prohibición en todo el país de la adquisición con fines de comercialización, preparación, producción, fabricación, mezclado, acondicionamiento, envasado, transporte con fines comerciales, almacenamiento, importación, exportación, comercio, distribución, venta y suministro de cigarrillos electrónicos, vapeadores y dispositivos análogos.
La medida incluye tanto dispositivos recargables como aquellos desechables o de un solo uso, con el objetivo de cerrar la cadena de comercio formal en torno a estos productos.
No obstante, se exceptúa de la prohibición el consumo y la posesión de estos dispositivos cuando no se destinen a las actividades comerciales mencionadas. Al mismo tiempo, se prohíben todos los actos de comercialización, publicidad o propaganda para promover su consumo en cualquier formato: medios impresos, digitales, televisión, radio u otros medios de comunicación.
Asimismo, se precisa que la autoridad sanitaria podrá realizar tareas de verificación, aplicar medidas de seguridad y disponer sanitariamente de los vapeadores y dispositivos análogos, sin perjuicio de las acciones correspondientes a otras autoridades en su ámbito de competencia.
Rectoría del Estado y no criminalización de usuarios
El senador Manuel Huerta Ladrón de Guevara explicó que el objetivo general de la minuta es fortalecer la rectoría del Estado sobre el Sistema Nacional de Salud, mediante una armonización normativa que busca prohibir la cadena de comercio de vapeadores, centralizar de forma estratégica las compras públicas y avanzar en la reingeniería financiera de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios. Enfatizó que la propuesta incluye la no criminalización de las personas usuarias de vapeadores y otros dispositivos.
De acuerdo con Huerta Ladrón de Guevara, se añadió la tipificación de un delito relacionado con estas prácticas comerciales, pero se aclara que no habrá sanción por la simple posesión de los dispositivos para consumo personal. La acción penal se dirige, según expuso, contra el lucro de la industria y no contra el ciudadano consumidor. Además, sostuvo que la minuta contempla un “blindaje comercial” y neutralidad competitiva acorde con el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, y que sus ejes rectores se centran en la prohibición de vapeadores, el control de precursores y la tipificación de delitos con pena privativa de la libertad para diversas conductas comerciales.
Argumentos a favor y en contra en el Senado
El presidente de la Comisión de Salud, José Manuel Cruz Castellanos, subrayó que el cáncer se mantiene entre las enfermedades con mayor mortalidad en el país y recordó que “hay que priorizar el bienestar y la salud del pueblo”.
En esa línea, la senadora de Morena Lilia Margarita Valdez Martínez afirmó que vapeadores y cigarrillos provocan enfermedades graves como el cáncer y expresó que “estamos a favor de regular el uso de los vapeadores, no estamos de acuerdo en que las niñas, niños y adolescentes los usen; habrá castigo para quien los venda”. Desde esta postura, la prohibición se interpreta como una medida de prevención y salud pública.
Desde la oposición, el coordinador del Grupo Parlamentario del PAN, Ricardo Anaya Cortés, lamentó que la minuta, en su opinión, entregará el mercado de los vapeadores al crimen organizado y agravará el problema.
Te puede interesar:
“Votaremos en contra no porque no sepamos el diagnóstico, sino que la solución que plantean va a aumentar el problema”, recalcó. De forma similar, el senador del PRI Ángel García Yáñez manifestó su inconformidad al considerar que la prohibición de la comercialización no resolverá el problema de las adicciones, sino que criminaliza a los usuarios y abrirá un mercado negro difícil de controlar.
Postura de PVEM y MC sobre la reforma
Por el PVEM, el senador Luis Alfonso Silva Romo reconoció que existe consenso en que el uso de vapeadores resulta nocivo para la salud, por lo que defendió la prohibición como una medida precautoria. Aseguró que, aunque algunos señalan que el proceso avanza con rapidez, se trata de la “premura que merece la salud de las y los mexicanos”, y afirmó que la reforma también fortalece el sistema de salud en su conjunto.
En tanto, el senador de Movimiento Ciudadano Luis Donaldo Colosio Riojas consideró que la minuta incluye aspectos potencialmente útiles, como apartados sobre salud digital, gestión de infraestructura y mecanismos de solución de controversias, pero cuestionó que se mantenga una lógica prohibicionista para los cigarrillos electrónicos. A su juicio, esta orientación abrirá la puerta al mercado negro y ofrecerá a los cárteles un nuevo y muy lucrativo negocio, por lo que mostró reservas frente al enfoque elegido en materia de vapeadores.