La Comisión de Medio Ambiente del Congreso de Yucatán aprobó este martes dos dictámenes orientados a fortalecer el cuidado de los recursos naturales del estado: la modificación de diversos artículos de la Ley de Conservación y Desarrollo del Arbolado Urbano y una iniciativa enfocada en la reforestación y preservación de flora endémica.
Durante la sesión, la diputada independiente Rosana Couoh Chan detalló que uno de los puntos más sensibles era la preocupación de las comunidades mayas del oriente de Yucatán, particularmente de pobladores de Popolá, Yalcobá, Chichimilá y Tixcacalcupul, quienes dependen de la leña para cocinar y subsistir.
“La gente me pregunta ‘si cortamos la leña, ¿nos va a afectar este dictamen?’ Lo que les respondí es que no, porque se respetan sus usos y costumbres. Este dictamen no busca lacerar, al contrario, busca fomentar la reforestación y que al talar un árbol se plante otro o varios, según la capacidad del terreno”, explicó.
Couoh Chan aclaró que las reformas no contemplan sanciones adicionales por tala, sino medidas para garantizar que se planten la cantidad de árboles adecuada al tamaño y ubicación de los que se derriben, con un enfoque en mejorar la calidad del aire y mitigar el calor en zonas urbanas.

Impacto de la Ley de Arbolado Urbano
Por su parte, la diputada panista Sayda Rodríguez Gómez destacó que las reformas representan un paso importante para el estado, aunque precisó que su competencia corresponde a los municipios, en particular sobre el manejo del arbolado en espacios públicos.
“No podemos reducir el valor de un árbol a una fórmula rígida de ‘uno por cuatro’. Hay especies que valen mucho más en términos de tiempo de crecimiento, tamaño o salud. Mérida ha avanzado en este tema desde 2015 con un plan de infraestructura verde, y la meta ahora es que otros municipios como Valladolid o Izamal adopten esquemas similares”, señaló.
Rodríguez adelantó que próximamente se discutirán ajustes en otras legislaciones relacionadas, como la Ley de Asentamientos Humanos, la de Desarrollos Inmobiliarios y la Ley de Desarrollo Forestal Sustentable del Estado de Yucatán, con el objetivo de atender no solo el arbolado urbano, sino también la deforestación en áreas de crecimiento habitacional y productivo.
Reforestación y preservación de flora nativa
Ambas legisladoras coincidieron en que la segunda iniciativa aprobada, referente a la reforestación y preservación de flora nativa como cedro, caoba y ciricote, tiene un valor estratégico, pues reconoce el papel de las comunidades indígenas como guardianes de la biodiversidad y promueve un modelo de desarrollo sostenible que no atenta contra su forma de vida.