Con el objetivo de resarcir lo que calificó como un “daño patrimonial” a los trabajadores del Estado, el gobernador de Yucatán, Joaquín Díaz Mena, presentó ante el Congreso local, a través del consejero jurídico Gaspar Alemañy Ortiz, una iniciativa de reforma a la Ley del Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado de Yucatán (ISSTEY).

Propósito de la iniciativa

En su conferencia de prensa mensual, el mandatario aseguró que esta propuesta busca corregir un retroceso en los derechos laborales ocurrido durante la administración anterior y tiene el propósito de hacer justicia social y dignificar el trabajo de los servidores públicos.

Estoy cumpliendo un compromiso con maestras, maestros, policías, trabajadores de la salud y todos los servidores públicos que sostienen a Yucatán desde las oficinas, escuelas y hospitales”, subrayó Díaz Mena.

Cambios clave en la propuesta

Entre los principales cambios, destacó la eliminación del “salario regulador”, que será sustituido por el salario de cotización basado en el promedio de los dos últimos años de sueldo, así como la prohibición de realizar inversiones riesgosas con los recursos del instituto.

Además, se reduce la edad mínima de jubilación de 65 a 55 años con al menos 15 años de servicio y se disminuyen los años de cotización requeridos, pasando de 35 a 30 para hombres y de 30 a 28 para mujeres. También se plantea la reducción de años de servicio para jubilación voluntaria, de 20 a 15 años, y se congela la cuota de aportación en 9% para los servidores públicos en transición.

Posición del Ejecutivo y respaldo a los trabajadores

El jefe del Ejecutivo estatal advirtió que no respaldar la propuesta significaría ir en contra de las y los trabajadores del Estado.

Quiero ser muy claro: no estar a favor de esta iniciativa es estar en contra de las y los trabajadores del Estado. Hoy llegó el momento de demostrar de qué lado estamos”, dijo Díaz Mena.

Entrega de la iniciativa y comentarios de legisladores

Al entregar la iniciativa, Alemañy Ortiz afirmó que se trata de una reforma largamente esperada. “La idea es dignificar el trabajo de las trabajadoras y trabajadores del Estado”, expresó ante Wilmer Monforte Marfil y Alejandro Cuevas Mena.

Monforte Marfil destacó que la propuesta corrige una “gran injusticia” heredada de administraciones pasadas. Por su parte, el director del ISSTEY, Diego Cetz Pech, subrayó que actualmente la institución escucha, asesora y acompaña a los trabajadores para que conozcan sus derechos y protejan su futuro.