Adrián Trejo
El próximo lunes, a más tardar, la Secretaría de Hacienda deberá entregar a la Cámara de Diputados el paquete económico del próximo año: la Ley de Ingresos, el Presupuesto de Egresos y la Miscelánea Fiscal.
Durante la plenaria de los diputados de Morena, el secretario de Hacienda, Edgar Amador, y la consejera Jurídica de la Presidencia, Ernestina Godoy, adelantaron algunos detalles del paquete.
Se trata de medidas que buscan aumentar la captación de recursos por parte del gobierno sin que concrete una reforma fiscal, como tarde o temprano tendrá que ocurrir.
De acuerdo con lo dicho por Amador, se incrementarán los impuestos a las bebidas azucaradas y a los productos denominados “chatarra”. El aumento vendrá disfrazado de una cruzada por la salud de los mexicanos.
Igualmente, aumentarán los impuestos a bebidas alcohólicas y a los cigarros.
Se prevé también un incremento a los productos sujetos al Impuesto Especial a Productos y Servicios (IEPS), aunque aún no se conoce en qué porcentaje ocurrirá.
La consejera jurídica adelantó, por su parte, que habría una modificación en la legislación aduanera.
“Será un proyecto de gran calado, que habrá de producir escozor”, afirmó.
Aunque aún no se conoce el documento, los agentes aduanales estiman que podría haber cambios en incentivos y en las propias tarifas de importación.
De acuerdo con cifras oficiales, durante los primeros siete meses del año las aduanas aportaron al erario 836,808 millones de pesos.
Caída la captación por turismo, a causa de la violencia en los destinos turísticos emblemáticos del país, y con una producción petrolera estancada, las aduanas, junto con las remesas de los mexicanos en el exterior, se han convertido en una fuente clave de divisas para el gobierno.
En los primeros meses del año, las aduanas contribuyeron con poco más del 25% de lo recaudado por la Secretaría de Hacienda.
De ahí que la reforma anunciada por Godoy despierte inquietud, pues si realmente “causará escozor”, no será el gobierno el que lo pague, sino los empresarios que las utilizan.
Falta conocer cuáles serán las prioridades del gobierno y, sobre todo, con cuánto pretende endeudarse si su meta era reducir significativamente el déficit fiscal.
Para este 2025, el gobierno se endeudará con 1.5 billones de pesos; el último año de López Obrador fueron dos billones.
¿Cuánto pedirán para 2026 para cumplir todos los compromisos de campaña sin afectar más sectores como salud, educación, campo y seguridad?
Ya veremos.
Ayer circuló en redes sociales un video de la comida anual que una revista organiza para reconocer a los 300 mexicanos más influyentes en diversos ámbitos.
Una de las invitadas y oradora fue la ministra Loretta Ortiz, cuyo discurso fue absolutamente desdeñado por los asistentes.
Mientras la ministra hablaba sobre el nuevo Poder Judicial, un paneo del video muestra que no había una mesa que pusiera atención a su intervención.
El hecho resulta significativo, pues se trataba de un auditorio compuesto por la élite empresarial, política, deportiva, artística y mediática del país.
¿Será que lo que ocurra en el Poder Judicial ya no importa porque se da por sentado de qué lado estará?

