Acciones preventivas ante la temporada de lluvias y ciclones

Ante el inicio de la temporada de lluvias y ciclones tropicales, autoridades federales y municipales redoblan esfuerzos para mejorar la infraestructura vial en Yucatán. Una de las prioridades ha sido atender los baches en el Periférico de Mérida, donde ya se han reparado más de mil 900 puntos críticos a lo largo de sus mil 500 kilómetros.

La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) en el estado se prepara para una segunda fase de intervención que incluirá mantenimiento, desyerbe y señalización en este anillo vial clave para la capital yucateca.

Evaluaciones constantes y zonas prioritarias

Manuel Pimentel Miranda, director estatal de la SICT, explicó que se realizarán inspecciones constantes para evaluar el estado de la carpeta asfáltica. Esto permitirá actuar con rapidez ante nuevos daños provocados por las precipitaciones.

Además, señaló que algunos tramos requieren atención inmediata, como la carretera Mérida-Tizimín, donde se han identificado daños relevantes. En contraste, ya concluyeron los trabajos en la Mérida-Kantunil y están por finalizar los detalles de señalización en la Mérida-Progreso.

Baches, costos y afectaciones a conductores

El impacto de los baches en el Periférico de Mérida no es menor. De acuerdo con el taller Partes Usadas de Oriente, reparar un automóvil dañado por uno de estos huecos puede costar hasta 2,450 pesos. Cada semana, este taller reporta cerca de 10 reparaciones relacionadas con el mal estado de las calles.

Por ello, las acciones preventivas no solo buscan preservar la infraestructura vial, sino también reducir los riesgos y gastos para los automovilistas.

Mérida activa su plan de protección civil

En el ámbito municipal, Cecilia Patrón Laviada, alcaldesa de Mérida, informó que ya se instaló el Consejo Municipal de Protección Civil, el cual integra a diversas autoridades y sectores de la sociedad. La presidenta municipal destacó que desde el inicio de su gestión se priorizó el rescate y repavimentación de calles, logrando atender más de 2,000 baches en toda la ciudad.

Asimismo, se puso en marcha un programa permanente de limpieza de rejillas y drenajes pluviales, con el fin de evitar inundaciones y proteger a la población durante esta temporada.

“Pedimos a la ciudadanía no tirar basura ni aguas jabonosas en las calles, ya que eso impide el correcto desalojo del agua”, exhortó la alcaldesa.

La estrategia continuará todo el verano con énfasis en prevención, mantenimiento y participación ciudadana.