Comunidades mayas luchan contra las llamadas mega granjas ya han provocado la deforestación de más de 11 mil hectáreas de Selva en la Península de Yucatán,
Una parte se ha instalado sin cumplir con las leyes ambientales y sin consultar a las comunidades locales, según un informe de la Asociación Greenpeace México.
Multas por violar normas
En el caso de Yucatán, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) multó el año pasado 26 de esos sitios por violar las normas ambientales y de uso de suelo.
Además clausuraron temporalmente un criadero en Santa María Chí, pero aún operan 222 granjas porcinas que pueden ser consideradas como mega granjas, por la cantidad de animales que tiene en sus instalaciones.
De las 222 granjas en Yucatán con algún registro, Greenpeace reporta que solo 18 tienen Manifestación de Impacto Ambiental.
Estos complejos industriales tienen una gran responsabilidad en la deforestación de las selvas y otros daños ambientales severos como la degradación del suelo, así como la contaminación de cenotes y del manto freático al verter los desperdicios de sus cerdos en zonas prohibidas o incluso en espacios al aire libre, según Greenpeace.
Daño a cenotes
El mismo informe señala que en el caso específico de Yucatán, destaca el daño que ha causado a varios cenotes, como ha sucedido en el municipio de Homún, en donde las comunidades mayas también llevan años luchando contra la operación de mega granjas porcícolas en esa zona.
Las mismas están ubicadas incluso en el llamado "Anillo de Cenotes", en reservas naturales y en general en áreas con suelos kársticos, que son comunes en la Península de Yucatán y donde se supone no deberían estar operando, afirma Greenpeace.
Señalan que el mayor riesgo de estas operaciones se encuentra cerca de la Reserva Geohidrológica Anillo de Cenotes, ubicado en Homún un sitio de importancia global, pues se trata de una red de grutas y cenotes que fueron provocadas por el impacto de un asteroide que golpeó la Tierra, en donde hoy se encuentra la comunidad costera de Chicxulub, hace más de 65 millones de años
“Las mega granjas de cerdos ejercen una fuerte presión sobre los ecosistemas de México y tienen una gran responsabilidad en la degradación del suelo, la contaminación del agua y el cambio climático. Las sanciones impuestas son un paso favorable, pero las autoridades aún deben reforzar su implicación y acción para prevenir este modelo”, dijo Carlos Samayoa, activista de Greenpeace México.
La actividad porcícola
La actividad porcícola en Yucatán genera una cifra considerable de empleos, tanto directos como indirectos. De acuerdo a información oficial de Grupo Kekén, la principal empresa productora de carne de cerdo en la entidad, se estima que la actividad genera alrededor de 12 mil empleos directos y otros 36 mil indirectos, "lo que convierte a este sector en un importante motor económico para la región", indica el grupo.
Comunidades mayas
Actualmente, existe una denuncia ciudadana que hicieron comunidades mayas de Yucatán, Campeche y Quintana Roo en 2020 contra las operaciones de las mega granjas de Kekén y otros grupos porcícolas en la región. Dicha denuncia se documentó con pruebas, la grave contaminación del acuífero y la deforestación que genera.