Fortalecer las alianzas intermunicipales para atender problemas comunes, como lo son los residuos sólidos urbanos, puede permitir que se rompa con el problema de cada tres años de empezar de cero con el tema de la recolección y disposición final de la basura en el estado, consideró el especialista en políticas ambientales Eduardo Batllori Sampedro.
Objetivos plasmados
Señaló que ese objetivo, plasmado en el Plan Estatal de Desarrollo (PED) 2024-2030 del Gobierno del Estado, puede ser una solución definitiva y a largo plazo de los problemas que tiene la entidad por la falta de un sistema consolidado para el manejo y disposición de desechos en todo su territorio.
“Al crear esas alianzas entre los municipios, se establecen compromisos compartidos y permite planear a largo plazo y acumular experiencia en el manejo de la basura, no como sucede ahora, que cada vez que termina una administración, se empieza de cero, creando así un círculo vicioso”, precisó.
Necesidades diferenciadas de cada zona
El experto en políticas ambientales indicó que, establecer una visión regional puede ayudar para atender las necesidades diferenciadas de cada zona, pues no es lo mismo lo que sucede en la región metropolitana que la del Puuc o la de Tizimín y Valladolid, por mencionar algunos ejemplos.
Además, si se logra incorporar la economía circular al tema de la basura, como también lo establece el PED, es probable que se pueda avanzar hacia la meta de cero residuos, consideró.
El Gobierno ha señalado que uno de los principales retos en materia de infraestructura y sostenibilidad es la gestión del agua y los residuos. En cuanto a la generación de desechos sólidos urbanos, el promedio diario de recolección asciende a 1 millón 886 mil 875 kilogramos, lo que equivale a 0.82 kilogramos per cápita, una cantidad cercana al promedio nacional.
Reducir el impacto ambiental
La adecuada gestión de estos residuos es fundamental para reducir el impacto ambiental y fomentar prácticas de economía circular que permitan su aprovechamiento, según el propio PED.
El entrevistado explicó que la economía circular es un sistema de producción y consumo que busca optimizar el uso de los recursos y minimizar la basura, promoviendo la reutilización, reparación y reciclaje de materiales y productos.
En lugar de un modelo lineal de "tomar-hacer-desperdiciar", la economía circular aspira a un modelo donde los materiales se mantienen en uso por el mayor tiempo posible, indicó.
“Lograr residuos cero es la meta de la economía circular, que deberá acompañarse de una política pública de industrialización ambiental para el aprovechamiento y transformación de residuos en insumos para otras áreas de las cadenas productivas”, subrayó el especialista en ecología humana del Centro de Investigaciones y Estudios Avanzados Unidad Mérida.
“Ojalá esta política pública se acompañe de los recursos económicos necesarios para instrumentar y operar adecuadamente, apoyando a los municipios con un pequeño incremento de sus participaciones estatales y federales etiquetadas para operar el organismo público descentralizado encargado de poner en marcha el plan en cada región”, finalizó.
Procesos para mejorar la recolección
El Gobierno ha planteado disminuir la acumulación de basura en el estado de Yucatán, con el objetivo de optimizar procesos para mejorar la recolección y manejo de residuos en temporadas críticas.
Entre sus líneas de acción destacan: fomentar la mejora en los tiempos de respuesta para la recolección de desechos, evitando acumulaciones prolongadas; implementar acciones de capacitación a las empresas encargadas de la recolección en el estado; adoptar el aprovechamiento de tecnologías de la información en los procesos de recolección y manejo de residuos sólidos; proponer esquemas de vinculación entre sociedad, gobierno e industria para la mejora de la recolección de basura.
Igualmente, se busca promover acciones con los tres órdenes de gobierno para gestionar la adecuada disposición de residuos peligrosos en el sector salud, industrial y comercial a través de impulsar la mejora de la infraestructura para la disposición de deshechos hospitalarios y tóxicos; promover la implementación de esquemas de formación a los sectores productivos sobre prácticas seguras de disposición y reciclaje de desperdicios peligrosos; así como campañas integrales que procuren la cultura de la sustentabilidad.